La asamblea de la Federación de Hogueras será la que decida si se retira la medalla de oro y brillantes al dictador Francisco Franco, concedida en el año 1973 a propuesta del entonces máximo gestor de la Fiesta, Tomás Valcárcel. Así se pronunció ayer el presidente de la Federación de Hogueras, Manuel Jiménez, quien concretó que la asamblea decidirá siempre que el Ayuntamiento de Alicante eleve una petición para que la Fiesta retire los altos honores. «La concesión fue un acuerdo asambleario, aprobado por unanimidad según registran los libros de la época, por lo que yo no tengo ninguna potestad para retirarle ahora la medalla a Franco. Si el Ayuntamiento quiere que se le retire ese honor, que nos lo comunique. Entonces lo llevaremos ante la asamblea y serán los festeros los que decidan», explicó ayer el actual presidente.

Este asunto no es nuevo. Hace ocho años, la asociación cultural Alicante Vivo, según explica uno de sus representantes a través de las redes sociales, preguntó a la Gestora por la medalla de oro y brillantes concedida a Franco dos años antes de su muerte. Según Alicante Vivo, la respuesta de la Gestora, entonces dirigida por Pedro Valera, a la consulta de si tenían «pensado» retirar los honores al dictador fue tajante: «No es nuestra intención. La historia para bien o para mal historia es y dado que somos Fiesta no politizamos con ella. Gracias igualmente».

Fuentes próximas a la Federación aseguran que la medalla que se entregó a Franco en abril de 1973 era realmente de oro y brillantes y fue costeada a partes iguales por todas las comisiones de hogueras y barracas. El dictador, según recogen publicaciones de la época, recibió en audiencia a una representación de las Hogueras en el Palacio del Prado. En ese encuentro, también se le entregó una placa que rezaba: «Las Hogueras de San Juan testimonian [...] su absoluta e inquebrantable adhesión y se honran ofreciéndole la medalla de oro y brillantes con cariño, admiración y respeto».

Desde la Federación, aseguran que se retirarán los honores si lo reclama el Ayuntamiento y la asamblea festera vota a favor.