El consejo de administración de la Entidad Pública de Saneamiento de Aguas Residuales (Epsar) ha aprobado congelar la tarifa del canon de saneamiento que se cobra en el recibo del agua. Esta medida, que supone un giro respecto a los incrementos de tarifa del anterior gobierno, «favorecerá a más de dos millones de hogares en la Comunidad Valenciana», según apuntó ayer la consellera Elena Cebrián. El canon se utilizó para costear algunos eventos y obras que no tienen que ver con el saneamiento y depuración, como la Expo Zaragoza 2008. En la provincia el importe medio del canon en el recibo del agua es de 30 euros.

La entidad que depende de la Conselleria de Agricultura también aprobó el Plan de Obras para el año 2017. El volumen total de obra que se prevé ejecutar para el ejercicio próximo es de 19,4 millones de euros. De ejecutarse en su totalidad, contribuirá a la creación de más de 500 puestos de trabajo. Asimismo, el consejo ha dado el visto bueno al presupuesto de 2017, que asciende a 278,53 millones de euros.

Por su parte, el consejo de participación, integrado por una amplia representación de colectivos sociales e institucionales y en reunión previa al consejo de administración, ha decidido intervenir en las poblaciones de menos de 500 habitantes que todavía no cuentan con planta depuradora. En total, en 2017 se actuará en 20 municipios.

La entidad de saneamiento colaborará también en el tratamiento conjunto de los subproductos líquidos o semilíquidos de elevada carga orgánica generados en algunas industrias y los fangos que se producen en el proceso de depuración. Con ello, la entidad prevé reducir el coste de explotación de sus plantas, y que las empresas solucionan el problema ambiental y económico que les supone la gestión de este tipo de subproductos.

Por otro lado, en la reunión se estudió la posibilidad de desarrollar una política de difusión tanto de las buenas prácticas en el uso del agua en los hogares como de los beneficios ambientales que se obtienen gracias al canon que pagan los ciudadanos.