Oposición frontal de la plataforma Renfe a que Miguel Ángel Pavón dirija el concurso de ideas que decidirá el futuro del Puente Rojo. La apuesta del edil de Urbanismo por mantener el tráfico rodado sobre la estructura voladiza que conecta Princesa Mercedes con San Blas, una de las tres alternativas que baraja el Ayuntamiento de Alicante para el futuro del Puente Rojo, está detrás de este rechazo a que el edil de Urbanismo controle este concurso de ideas, al que también se oponen.

«No estamos de acuerdo porque es el camino para que se acabe haciendo lo que quiere Pavón», denunció ayer José María Hernández, portavoz de esta plataforma que aúna a siete asociaciones de vecinos y a otras tres de comerciantes. «No nos fiamos de que sea Pavón el que lo dirija», añadió.

En este contexto, la plataforma Renfe mostró su disconformidad con el acuerdo alcanzado el viernes entre el Ayuntamiento y altos cargos de la Conselleria de Territorio y Avant para dividir en dos el proyecto de urbanización de los terrenos entre la Estación del AVE y la Vía Parque. «Lo que no vale es que ahora llegue Pavón y, como concejal de Urbanismo, quiera darle la vuelta al proyecto», esgrimió el portavoz de la plataforma.

«Estamos absolutamente en contra de lo que se ha aprobado. Queremos que el puente desaparezca como alternativa de paso superior de vehículos», señaló José María Hernández, quien denuncia que el motivo de dividir en dos fases este ambicioso plan urbanizador se debe a que «Pavón no quiere la Estación Intermodal donde está aprobada por todos y, además, también quiere modificar el tema de las plusvalías y de la altura de los edificios».

La plataforma Renfe sigue apostando por «la desaparición del puente y la creación de un paso subterráneo, que es lo aprobado en pleno», aunque también aceptarían «la prolongación de la Gran Vía en superficie con un gran parque» o «mantener la estructura del puente a modo de mirador, con los coches circulando por debajo».