La consellera de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio, María José Salvador, y el alcalde de Alicante, Gabriel Echávarri, han mantenido hoy una primera toma de contacto después de que el Consell haya aceptado definitivamente el desistimiento voluntario de Alicante Avanza. En este sentido, las dos instituciones han acordado trabajar conjuntamente y con la máxima colaboración para fijar una hoja de ruta a seguir. Así, se ha planteado la necesidad de analizar todas las posibilidades legales y urbanísticas así como todas las opciones posibles para la llegada de Ikea a Alicante. Al encuentro de Valencia no ha acudido el vicealcalde y responsable de Urbanismo en Alicante, Miguel Ángel Pavón.

A partir de ahora, los técnicos analizarán la situación y las diferentes partes estudiarán las opciones más adecuadas para desarrollar esta actuación con la mayor eficiencia posible. "Desde el Gobierno valenciano se facilita la llegada de inversiones a través de diferentes vías como los planes parciales como se está haciendo con la ampliación del Parque Empresarial de Elx o bien mediante el Programa de Inversión Estratégica Sostenible (PIES) que anunció el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, y que se aprobará en la próxima modificación de la Ley de Ordenación del Territorio (LOTUP).

Alicante Avanza y la multinacional Ikea rompieron en julio de manera voluntaria el contrato que les unía en torno al proyecto para la construcción de una gran tienda y un centro comercial sobre 125.000 metros cuadrados en terrenos del barrio de Rabasa, en Alicante. A partir de ahí y archivada la actuación urbanística en la zona, todo vuelve a empezar para que Ikea termine abriendo su tienda en Alicante, algo que buscan todos las partes pero cada día parece más complicada, aunque se baraja, incluso, que el proyecto siga en Rabasa y vaya acompañado, incluso, de un hospital.