El portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Alicante, José Luis Cifuentes, se reafirma en que no volverá de Alemania para asistir hoy al pleno municipal, pese a que con su ausencia aboca al fracaso la reprobación que él mismo presentó para reprobar al edil de Limpieza, Víctor Domínguez. Cifuentes, ante la advertencia de su partido de retirarle la portavocía del grupo municipal, avisa de que si hay medidas contra él habrá «reacción» por su parte. Cifuentes no quiso ir más allá, dejando en el aire cuál sería su decisión: Irse, dar batalla interna o marcharse del partido con su acta.
En el último de los supuestos, Cifuentes quien fuera durante años militante del PSOE antes de enrolarse en Ciudadanos y que ha evidenciado su afinidad con el acalde socialista, Gabriel Echávarri pasaría a formar parte de los ediles no adscritos y podría ser la pata que diera estabilidad al tripartito, que está en minoría tras haber expulsado de sus filas a Nerea Belmonte.
Cifuentes, sin embargo, no quiso desvelar sus intenciones. Preguntado sobre la advertencia de su partido de retirarle la portavocía por no volver a tiempo del congreso sobre lingüística al que asiste en Alemania en su papel de catedrático de Lengua Castellana de la Universidad, el regidor replicó: «Qué le vamos a hacer. Cada uno que actúe según lo que considere oportuno. Ellos y yo. Hay una acción reacción por parte de todo el mundo». Cifuentes no quiso aclarar a qué se refería, pero incidió: «Toda acción tiene su reacción».
Desde Alemania, Cifuentes apuntó que «yo tengo mi vida profesional y no creo que sea la única persona» en esa situación, por lo que agregó que «si eso tiene consecuencias» también ocurrirá «al revés». En esa línea incidió en que «no creo que sea el único político de la Comunidad Valenciana, aunque seamos pocos» que no tiene dedicación exclusiva, en alusión a que no cobra del Ayuntamiento sino de la Universidad. «Yo hago como una ONG con la política porque no cobro», dijo Cifuentes. El portavoz de Ciudadanos añadió que «entiendo que alguien deba tener una exigencia y un compromiso extra, yo no» si bien admitió que «sí tengo una responsabilidad» entre la que está, reconoció, «defender esa propuesta» (la reprobación). Sin embargo, justificó que «por circunstancias profesionales» no lo ha hecho «y no lo cambio».
Desde su partido, sin embargo, no comparten las justificaciones que hasta ahora viene dando Cifuentes. Su ausencia deja en minoría los votos de la oposición y pese a ello desde Ciudadanos mantienen la reprobación, que será la última iniciativa en debatirse en el pleno que se celebra hoy a las 16.30 horas.
Iniciativa
Desde el grupo municipal de Ciudadanos y desde el propio partido esgrimen que pretenden poner en un brete a PSOE y Compromís para que se pronuncien sobre si apoyan o no la gestión de la limpieza del edil de Guanyar Víctor Domínguez durante el verano. Sin embargo, admiten que el Reglamento Orgánico del Pleno (ROP) sólo permite a los autores de las iniciativas retirarlas y, en este caso, la reprobación está firmada por el propio Cifuentes, que ya avanzó que no pretende retirarla.
Así las cosas, la reprobación de Domínguez se debatirá y votará en el pleno, en ausencia de Cifuentes y con una oposición en minoría. Y es que PP, Ciudadanos y los dos ediles tránsfugas sumarán 14 votos, los mismos que tiene el tripartito (PSOE, Guanyar y Compromís). Un empate técnico que el alcalde puede deshacer decantando la balanza con su voto de calidad. De esta manera, no sólo la reprobación de Domínguez está abocada al fracaso. El tripartito podrá aprobar el traspaso de fondos para ayudas al alquiler entre Vivienda y Acción Social, pese a que la oposición lo tumbó anteriormente por desconfianza en la gestión de la edil responsable, Julia Angulo.
Enfado monumental
Una ausencia que se vuelve clave y que para Ciudadanos resulta imperdonable. El enfado entre los miembros de la agrupación naranja es monumental. Ni en el partido ni en el grupo municipal alcanzan a entender por qué Cifuentes, cuya ponencia en el congreso fue ayer por la mañana, se ha negado a regresar a tiempo para asistir a un pleno clave en la labor de oposición de Ciudadanos. Y es que la reprobación del edil de Limpieza era una baza con la que desde la dirección del partido pretendían dar un empujón a la tibia labor de oposición que venían desarrollando en el Ayuntamiento. Precisamente esa tibieza, así como la cercanía de Cifuentes al alcalde socialista, venía generando malestar en las filas de la formación de Albert Rivera. La ausencia de Cifuentes es, sin duda, la gota que colma el vaso, y para muchos motivo más que suficiente para apartarlo de la portavocía municipal.
La apuesta de C's
Aunque, en un principio, el edil de C's Vicente Buades iba a defender la reprobación de Domínguez ante la ausencia de Cifuentes, finalmente lo hará la portavoz adjunta municipal, Yaneth Giraldo, que es la apuesta de la dirección del partido para suceder a Cifuentes como portavoz. El cambio se adoptó ayer, después de que Buades defendiera la actitud de Cifuentes en el programa La Línea Roja de Información TV asegurando que «su compromiso es firme» y que Cifuentes no cobra dedicación exclusiva.
Sin embargo, pocos en Ciudadanos encuentran justificación a la ausencia de Cifuentes. «El compromiso que adquieres al recoger el acta no depende del sueldo», escribía el portavoz de la gestora local, Fernando Llopis, en una red social. La propia Giraldo admitía ayer estar «sorprendida» por el desafío de Cifuentes al no regresar a tiempo. Giraldo consideró «oportuno» mantener la reprobación y defenderla e invitó «a todos los partidos a ser consecuentes». La portavoz adjunta lamenta que ayer Cifuentes no respondiera a sus llamadas.
