Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Escupir hacia arriba

Escupir hacia arriba

En una lamentable actuación que dice muy poco en favor de quienes la provocaron, trabajadores del Puerto increparon el jueves al vicealcalde de Alicante Miguel Ángel Pavón hasta el punto de obligar a intervenir a un escolta. Un comportamiento que, por muy legítimas que sean sus reivindicaciones, les quita toda razón como cuando, en su momento, afectados por la quiebra de la CAM abordaron a gritos al exdirector general Roberto López Abad en plena calle. Incidentes no sólo censurables sino más propios de sociedades mafiosas que de un Estado de Derecho. Pero en el caso de Pavón el acoso y la agresión verbal es especialmente grave en tanto que se trata de un representante público. Un hecho que, con independencia de filias, fobias y colores políticos, tenía que haber provocado una repulsa unánime. Sin matices. Pero en vez de eso, ¿qué tenemos? Una primera autoridad, Gabriel Echávarri, evitando condenar la deplorable salida de tono de los trabajadores portuarios (no tanto, intuyo, porque comparta su postura como por el divorcio permanente que mantiene con su compañero de gobierno), a quien encima acusa, aunque veladamente, de haber provocado el altercado. Y una exalcaldesa, Sonia Castedo, que lejos de censurar el ataque, lo justifica llegando a decir que se lo ha ganado. Tremenda torpeza por parte de ambos obviar lo que Pavón representa y no reparar en que si se escupe hacia arriba en algún momento te puede caer encima.

Compartir el artículo

stats