La Generalitat acaba de imponer una sanción de 42.000 euros a los responsables del restaurante Mauro&Sensai, ubicado junto a la torre del mismo nombre en la paya de San Juan, por romper el precinto con el que la Policía Local clausuró su terraza en el verano del año pasado.
Después de reiteradas quejas de los vecinos, el responsable de Urbanismo del Ayuntamiento de Alicante, Miguel Ángel Pavón, había decretado el cierre de este espacio por exceso de ruido y por carecer de un informe de Cultura pese a estar en el entorno de la torre, declarada Bien de Interés Cultural (BIC).
La reapertura de la terraza clausurada provocó dos procedimientos: uno administrativo, que es el que ahora ha desembocado en la sanción de los 42.000 euros, y otro penal, por desobediencia, que se sigue instruyendo en un juzgado de Alicante.
La Generalitat considera que los responsables de Taura Gestión Gourmet S. L. y Sensai restauración S.L. (sociedades que explotan el negocio) han incurrido en faltas administrativas graves y muy graves por lo que se les impone esta multa, que ya es firme, después de que haya sido confirmada tras el recurso presentado por los sancionados, a quienes únicamente les quedaría ahora recurrir a la jurisdicción Contencioso-administrativa.
Desobediencia
Además, y en paralelo a este proceso, un juzgado de Alicante está instruyendo la querella que por la reapertura de la terraza clausurada presentó en Fiscalía hace ahora un año la concejalía de Urbanismo por un delito de desobediencia. A lo largo de la instrucción el magistrado ha citado a declarar al menos a dos responsables de local en calidad de imputados (ahora investigados), estaba previsto hacer lo mismo con un tercero y reclamó al Ayuntamiento documentación sobre el expediente de este negocio.
Los dueños del restaurante también recurrieron ante un juzgado Contencioso-Administrativo la orden municipal de clausura de la terraza.
