La Agencia Estatal de Meteorología advirtió ayer de que el otoño que ha comenzado a las 4.21 horas de la pasada madrugada va a estar marcado por el calor, más elevado de lo normal, y la falta de lluvias, aunque no se descartan tormentas puntuales. De momento, sin embargo, ni rastro de la gota fría mientras la temperatura del mar ha comenzado ya a bajar y está en los 25 grados, tres menos que hace diez días.
El verano climático (junio, julio y agosto) fue también muy seco en la provincia, con un 70% menos de precipitación de lo que suele ser normal en este periodo. Fue el verano más seco de los últimos diez años, desde 2006. Coherente con las escasas precipitaciones, también hubo menos actividad de tormentas de lo que suele ser normal.
El verano resultó cálido con una temperatura media de 0,6 grados por encima del promedio normal, pero lo más destacado ocurrió este septiembre, ya que en un breve periodo de tiempo se registraron los días más cálidos de 2016 y, desde que hay registros en un mes de septiembre. A los días muy calurosos sucedió una brusca bajada de temperatura que dejó registros frescos a mitad de mes, según Meteorología.
Por otro lado, con datos hasta el 20 de septiembre, a falta de por tanto de 10 días para cerrar el balance del año hidrológico 2015-2016, éste ha resultado extremadamente seco.
