El presidente de la Federación Provincial de Asociaciones de Padres de Alumnos de Alicante «Gabriel Miró», Ramón López, defendió ayer que lo más apropiado sería mantener la posibilidad de la exención de la asignatura de valenciano en determinadas zonas castellanohablantes tras el anuncio del nuevo decreto de Educación.

«En toda la Comunitat, hay sólo un 1,8% del alumnado exento de Valenciano. Estoy a favor de que se mantenga la posibilidad de elegir. Si lo imponemos, posiblemente causemos más daño, mejor dejarlo como está, porque la incidencia es mínima». «Vivir en una comunidad con dos lenguas cooficiales es un lujo desde el punto de vista cultural, pero me gustaría que esa riqueza no se llevara al plano ideológico», dijo. El presidente defendió que las familias tienen derecho a elegir en qué idioma estudian sus hijos y que no se generalice la lengua valenciana como vehicular para la mayor parte de las asignaturas. Y criticó que la Conselleria de Educación les facilitara ayer el borrador del decreto y les convoque a una reunión mañana.

El diputado nacional del PP Joaquín Albaladejo dijo que están «a favor de la libertad y de la vigencia de la exención en la zona castellanoparlante». Está «a favor de la no exigencia de requisito lingüístico en las zonas castellanoparlantes para acceder a la función pública».

El portavoz de las Ampas de Torrevieja y miembro de la FAPA Enric Valor, Francisco Pacheco, aseguró que la posibilidad de que se elimine la exención es muy «conflictiva» porque ha sido asumida como un derecho para los padres desde principios de los ochenta. Asociaciones de padres y el PP no descartan defender la exención con movilizaciones, aunque prefieren esperar a que se concreten los planes del Consell. La edil y diputada de Torrevieja, nacida en La Vila, Fanny Serrano (PSOE) cree que se debe mantener la posibilidad de exención. Abogó porque la administración incentive y gratifique a los alumnos que deciden estudiar valenciano «porque es muy difícil y lo tienen todo en contra», sin un entorno en el que practicar la lengua. Reclamó realizar una labor de promoción para que se conozcan en la Vega las ventajas desde el punto de vista cultural y de acceso a la función pública que tiene el aprendizaje.

Escasa exención

Los jóvenes que piden la exención en Elda roza el 5% en Bachiller mientras que en Secundaria el porcentaje desciende y la incidencia en Primaria es casi imperceptible. Sólo un 5% de los alumnos del IES La Melva han pedido la exención de la asignatura mientras que ninguno de La Torreta y El Monastil la ha demandado. El porcentaje es más alto en la concertada. La edil de Educación, Laura Rizo, señaló que «la situación en Elda, con respecto del valenciano, es de absoluta normalidad». El portavoz del PP, Fran Muñoz arremetió contra la política de Educación. Las voces en la calle son poco críticas. «Luego te exigen el valenciano, para las oposiciones es obligatorio saberlo, así que hay que estudiarlo», reflexionan.

El alcalde de Villena de Los Verdes, Javier Esquembre, ve positivo que los alumnos «aprendan valenciano porque es importante para las relaciones sociales, económicas y culturales. Vivimos en una zona donde el valenciano es la lengua de referencia. Sin embargo, no es bueno que se obligue a estudiar a los alumnos en valenciano». El PP local insistió en la apuesta por la libertad de los padres a decidir. La propuesta «es un retroceso a veinte años atrás, avivando un debate ya cerrado imponiendo una lengua y fomentando la crispación», dijo Ana Más.