La Asociación Provincial de Promotores de Viviendas de Alicante (Provia) ha reclamado hoy a los ayuntamientos que establezcan bonificaciones fiscales en las plusvalías para el vendedor y en el IBI para el consumidor, para las viviendas con certificación energética A y B. Este factor contribuiría a que, tanto los propios promotores como el comprador o inquilino tomaran una mayor conciencia del valor de la sostenibilidad y la eficiencia energética, objetivo que se persigue desde la comisión, apuntó ayer la patronal en un comunicado.

Entre los objetivos de la comisión de Innovación y Sostenibilidad en el sector inmobiliario de Provia se encuentra el crear conciencia ecológica y de sostenibilidad en el sector inmobiliario. Por ello, hoy martes se ha celebrado en IFA, coincidiendo con la inauguración de Firamaco, una jornada informativa en la que se ha reflexionado sobre la comunicación al cliente y puesta en valor de los certificados de sostenibilidad y eficiencia energética en la promoción inmobiliaria, y sobre la importancia de dar a conocer a la sociedad las ventajas de una vivienda saludable.

Compradores, propietarios e inquilinos de viviendas tienen que comenzar a valorar el consumo de sus viviendas puesto que existe una diferencia importante en el gasto de una vivienda con calificación energética G respecto a otra calificada con la letra A; gasto que puede verse reducido en unos 2.300 € al año. Pero lo importante no es sólo conseguir una vivienda eficiente energéticamente, sino ir más allá para crear espacios saludables para vivir, libres de contaminación, viviendas seguras, limpias, con una adecuada gestión de residuos, y otros tantos factores que contribuyen a hacer una vivienda saludable.

Las exigencias que se establecen en el Código Técnico de Edificación (CTE) para nuevas construcciones, en vigor desde 2007, la obligación de obtener la etiqueta energética para comercializar viviendas, obligatoria desde 2013, y el horizonte exigido por Europa para 2020 para reducir un 20% el consumo de energía de los edificios, de minimizar un 20% sus emisiones de CO2 y potenciar las renovables son aspectos que debe conocer el consumidor y demandarlos a la hora de comprar o alquilar una vivienda, al igual que ya hace cuando va a adquirir electrodomésticos o automóviles.

Para ello, hoy se han dado cita en IFA Carmen Subirón e Isabel de los Rios, por parte del Instituto Valenciano de Edificación, quienes han ofrecido su punto de vista como entidad certificadora, aportando datos sobre buenas prácticas en España y otros países para poner en valor con éxito los certificados de sostenibilidad.

Además se ha ofrecido también la visión desde el punto de vista académico por parte de Antonio Galiano Garrigós, director de la Cátedra Internacional Marjal Healthy de la Universidad de Alicante, quien comunicado que la puesta en valor de la sostenibilidad pasa por trabajar de forma conjunta y global para las personas con el fin de mejorar su calidad de vida.

Por último, también se ha contado con la presencia de David Cánovas, experto en branding, marketing e innovación empresarial, General Manager de LotusInnovation y Presidente del Rotary Club de Alciante. Para él, la clave de la puesta en valor de la sostenibilidad no es trasmitir lo que vendemos, sino cómo lo vendemos.