Las declaraciones del edil de Urbanismo, Miguel Ángel Pavón, de estar siendo torpedeado en su trabajo por Alcaldía y Recursos Humanos, han conseguido la unanimidad de parte del gobierno tripartito y de la oposición por primera vez en el actual mandato. Todos coincide en una cosa: en que «se queja de vicio» y en que se «deje de excusas» cuando afirma que no le dotan del personal que necesita para solucionar la acumulación de expedientes de licencias de Urbanismo sin resolver. Un atasco que ha provocado las quejas de los promotores, que denuncian demoras de cinco meses cuando la ley obliga a resolver estas peticiones en dos meses.
Desde el PSOE, grupo al que pertenece el alcalde Gabriel Echávarri, aseguran que en marzo ya se le ofreció al edil y vicealcalde la posibilidad de que los funcionarios de Urbanismo hagan horas extra si tienen esa necesidad, y que el concejal de Guanyar no ha adoptado una solución puesto que no lo ha solicitado. El lunes Echávarri le reiteró esta oferta. «Todas las concejalías quieren más personal pero siguen trabajando con lo que tienen. Cada responsable político debe hacerse cargo de su concejalía y sacar adelante el trabajo», dijeron desde Alcaldía. Dado que los ediles socialistas del tripartito reconocen que hay un notorio retraso de más de dos meses en la concesión de licencias, ofrecen la solución de las horas extra. «Si él (Pavón) entiende que lo necesita, que lo pida. El alcalde ha ofrecido esta posibilidad. Él no lleva Urbanismo, sólo sabe el día a día de las quejas, pero si hay una necesidad, que (Pavón) la curse». Desde el PSOE recordaron que el plan de ajuste al que está sometido el Ayuntamiento impide contratar personal y cubrir jubilaciones, «y él lo sabe». Y no quisieron valorar las declaraciones sobre que le están torpedeando, «no vamos a entrar en una guerra, esa dinámica no nos interesa».
El portavoz del tripartito, Natxo Bellido, se alineó con Echávarri al afirmar también que la única fórmula posible para buscar soluciones en áreas atascadas como Urbanismo ante las trabas que impone el plan de ajuste son las horas extra. «Nadie en el equipo de gobierno quiere torpedear a nadie, sólo buscar fórmulas para paliar atascos», dijo. En este sentido, recordó que no es la primera vez que el tripartito busca soluciones «imaginativas» para conseguir un refuerzo de personal, como ocurrió con la tramitación de Xarxa Llibres o las inspecciones a la contrata de recogida de basuras y limpieza viaria. Sin embargo, Bellido ve complicado en el caso de Urbanismo el trasvase de trabajadores de unas áreas a otras porque, afirmó, en todas las concejalías «objetivamente» falta personal, así como en la Policía Local y en los Bomberos. De ahí que también considere la mejor solución las horas extra, como se hizo, recordó, hace un año con el bloqueo de las licencias de veladores.
En la oposición piensan de forma similar. El portavoz del grupo popular, Luis Barcala, requiere a Pavón que «se deje de excusas» y ponga soluciones al atasco en la concesión de licencias urbanísticas. Y dice que el vicealcalde miente porque hace unos días negó retrasos en la tramitación.
Barcala no está de acuerdo con las horas extra como solución y reclama que se reorganice el departamento de Urbanismo. Por su parte, Ciudadanos discrepa de la reorganización que hizo Pavón de su área hace unos meses. «Tiene una plantilla de 68 funcionarios, no de sesenta, como dice. De ellos 31 son jefes, de los que doce no tienen subordinados a su cargo. Esa reorganización la hizo Pavón, así que no le eche la culpa al anterior gobierno del PP, al PSOE y a Recursos Humanos. Mucho depende de él, que está demostrando su mala gestión», apuntó el portavoz de Ciudadanos, José Luis Cifuentes, que considera que el catálogo de protecciones está bloqueando el área. Cifuentes piensa también que los encontronazos de Pavón y Echávarri perjudican el normal funcionamiento de la ciudad.
Desde Guanyar incidieron en que Pavón ha traslado en numerosas ocasiones al alcalde los problemas de personal que tiene el área de Urbanismo.
