La playa de San Gabriel es el rinconcito al que los vecinos del barrio del sur de Alicante acuden a darse un baño y relajarse, si el estado de este rincón litoral lo permite. Cuando no es la suciedad del agua, en la que hace un par de años aparecieron peces muertos, es el mal estado de la arena, donde este verano los bañistas se han llegado a encontrar jeringuillas ya recogidas tras alertar a los servicios de limpieza. Pero son las montañas de algas allí acumuladas desde hace años, según denuncian los usuarios de esta playa, lo que más les indigna.

«Las van acumulando desde hace mucho tiempo, al menos tres o cuatro años», critica Ramón Ruiloba, vecino de Gran Vía Sur. Los usuarios de la playa de San Gabriel se quejan de que atraen mosquitos y generan malos olores y piden que se retiren también por su mal efecto porque «no se lo llevan nunca». En el pliego de condiciones de la contrata de limpieza y recogida de basura de Alicante figura expresamente que «en el tramo de la playa de San Gabriel se retirarán las algas de primera línea y se amontonarán en la zona destinada para este fin. En lo demás será tratada como una cala». Es decir, limpieza de la suciedad abandonada, vaciado de las papeleras y retirada de residuos que las desborden. San Gabriel no está incluida, sin embargo, entre las playas donde se criba la arena.

Los vecinos no parecen contentos con su limpieza. «Hay porquería a ultranza y limpian un 20%. La pala excavadora que entra por la pasarela peatonal tiene una potencia increíble pero hacen un poco y se van», señalan descontentos. Sin embargo, reconocen que en cuanto vieron jeringuillas que achacan a personas que este verano pernoctan en la playa acudieron a retirarlas con rapidez. Pero afirman que el arenal sigue sucio, con numerosas colillas y otros restos, y basura en cualquier resquicio. Además, las escaleras de acceso a la playa presentan numerosos desperfectos, y afirman que la pasarela peatonal que salva las vías y que permite acceder al mar está «llena de roña y oxidada».

La playa acapara numerosas quejas pero no todas, porque también las hay sobre el barrio. Especialmente sobre los actos vandálicos contra la pasarela peatonal que se inauguró hace tres años, y que fue la primera hecha con hormigón de alta resistencia en España. En general, el barrio se queja de la falta de vigilancia. La asociación de vecinos de Gran Vía Sur ha reclamado reiteradamente más presencia policial.

En cuanto a la playa, ayer el PP denunció a través de las redes sociales que se acumulan algas, basura y hay «gente acampada». Los populares reclaman una «actuación urgente» ante la «abundante suciedad».