El incremento de los segundos usos de los libros -léase generalización de los bancos de libros en el caso de la Comunidad Valenciana-, así como el hecho de que la renovación este próximo curso se limita a tres cursos (2º y 4º de ESO y 2º de Bachillerato), " hace previsible una contracción del mercado", según alerta el informe anual de la Asociación Nacional de Editores, Anele.

Los editores aseguran en su informe que han "logrado minimizar el incremento de precios de los libros de texto" que estiman en un 1,1% para el curso que arranca el próximo 8 de septiembre.

El sector admite que la facturación del sector repuntó en el curso 2015-2016, como consecuencia de la renovación de seis cursos de golpe, (2º, 4º y 6º de Primaria; 1º y 3º de ESO; y 1º de Bachillerato), pero añaden que la compra de libros "se mantienen aún por debajo de la que había en 2011, en plena crisis. El gasto medio por alumno desde entonces ha disminuido en 8,16 euros, hasta los 102,96€", calculan.

Los editores abogan por que la implantación de los modelos de ayudas a las familias "se haga de una manera sostenible", ya que de otra forma opinan que "se genera incertidumbre tanto en la comunidad educativa como en el sector editorial y librero".

Con respecto a la edición de libros de texto digitales, constanta que sigue un "ritmo creciente", aunque los editores también lamentan "la falta de entendimiento entre el Ministerio y las Comunidades Autónomas para crear una plataforma común de contenidos digitales".