Los árboles de la Rambla lucen saneados y con las ramas recortadas después de la intervención que realizaron ayer operarios de la contrata de Jardines en la céntrica avenida. Los trabajadores podaron las ramas más largas que rozaban el suelo y tapaban las farolas a petición de los comerciantes del centro «para que la Rambla se vea más iluminada».

Una intervención de mantenimiento que se realiza cada varios meses para que el arbolado se mantenga en condiciones después de que haya habido ocasionalmente quejas por estar descuidados. El saneamiento ha sido comedido para no dejar pelados los árboles y que sigan dando sombra en plena temporada turística de verano. Los operarios fueron depositando la hojarasca en un vehículo de apoyo que les acompañaba durante su recorrido por la céntrica arteria alicantina.