La aglomeración de población que recibe la provincia en verano, volcada con el turismo, y la sequía que asola a la zona, hacen insuficiente la cantidad de agua que recibimos del trasvase del Tajo, en palabras de Ángel Urbina, presidente de la Sociedad Agraria y Transformación San Enrique, de Elche, a su vez miembro de la comisión técnica de la mesa provincial del agua de la Diputación.

Con dos millones de habitantes, tantos como en el País Vasco o en Castilla la Mancha, «somos la provincia con mayor déficit de agua en toda España, porque no tenemos ríos, no llueve, y la gente sigue eligiendo la zona para vivir y venir, lo que aumenta la presión del abastecimiento», sopesa Urbina. Los actuales 20 hectómetros cúbicos por mes que recibimos del trasvase, de los que un 9,5% se dirigen al abastecimiento de la población y un 11,5%, lo que sobra, para el regadío, «sigue siendo poca agua, es muy poco para los meses de julio, agosto y septiembre. Para los siguientes de octubre, noviembre y diciembre necesitaremos que llueva porque lo hace cada vez menos y por lo tanto los regantes recibimos menos agua».

Extra

Como uno más de los regantes, Urbina señala que están esperando a que haya nuevo Gobierno para poder presentarle una serie de proyectos técnicos que aportarían agua extra a la provincia.

Tras la aprobación, en enero, de los 16 planes hidrológicos en el Estado, los regantes perciben que en 14 de ellos sobra el agua y que los dos únicos en los que falta son los correspondientes a Alicante: el de la cuenca del Segura, del que el 60% es para la provincia y el resto para Murcia; y el del Júcar que aporta siete partes para Alicante y una para Valencia. «Somos una provincia condenada a no desarrollarse si no se le garantiza el agua necesaria», afirma.

Los nuevos proyectos técnicos previstos contemplan canalizaciones para intentar aportar agua extra al Tajo-Segura «sin que tenga ningún coste para el Estado», según explica Urbina.