La empresa de limpieza de Alicante reforzará hasta el 31 de agosto su actuación en la zona de playas, en parte del centro y en tres barrios de la ciudad, en concreto en la Zona Norte, Benalúa y el Pla, ante las deficiencias en el aspecto y el aseo de la ciudad en plena temporada turística y el aumento de las incidencias y las quejas de los ciudadanos. La medida no supondrá aumento del coste del servicio, según el concejal de Limpieza, Víctor Domínguez.

Entre las quejas destacan las referidas a la céntrica plaza de Gabriel Miró, que obligan a los camareros de los establecimientos de restauración a barrer varias veces al día, o la suciedad acumulada en la salida de la estación de autobuses, que la UTE limpió tras la denuncia de este diario, aunque el Ayuntamiento insiste en que son terrenos portuarios. «No nos compete y debería abordar su limpieza el Puerto», insistió ayer el edil de Limpieza, Víctor Domínguez.

El refuerzo del baldeo con tres camiones cisterna más se decidió ayer en una reunión entre el alcalde, Gabriel Echávarri, que con ella volvía a la actividad pública tras sus vacaciones; el concejal portavoz del gobierno tripartito, Natxo Bellido; y el gerente de UTE Alicante, Manuel Docampo, convocado por el primer edil tras ese aumento de las quejas. El edil de Limpieza estaba ausente de Alicante por vacaciones pero fue informado de la reunión.

Según explicó UTE Alicante, el refuerzo del baldeo se hará al margen de la planificación habitual de la ciudad, que es de una vez o dos por semana en el centro, y entre 45 y 67 días en los barrios, según lo que figura en el pliego de condiciones.

De ahí que, añadieron desde la empresa, se vayan a reforzar diversos barrios para que el baldeo sea cada 15 ó 20 días. La maquinaria habitual de baldeo en Alicante son ocho cubas para el diurno y cuatro para el nocturno, y se verán incrementadas con tres más para las zonas más necesitadas de este servicio. Informa la UTE que desde el 29 de abril de 2004 Alicante está sometida a restricciones de baldeo con agua potable por la sequía, y que el que se hace se realiza con agua de las depuradoras de Rincón de León y Orgegia, y de los cuatro acuíferos salinos.

El edil portavoz, Natxo Bellido, cuestionado por las quejas sobre suciedad en los contenedores, aseguró que se limpian regularmente. Explicó que la reunión con la UTE se debe a que quieren saber por qué hay más quejas e incidencias si hay más personal este verano tras el refuerzo, recordó, con 48 empleados, lo que supone un 10% para una plantilla de unos 480. En este sentido, recordó que el volumen de población ha subido en Alicante de forma considerable gracias al turismo, que se hace más vida en la calle y ha llovido poco. «Le hemos transmitido a la UTE que es una época muy importante para la ciudad y que necesitamos dar una buena imagen a nuestros visitantes». Domínguez dijo por su parte que algunos de los 40 trabajadores extra van a la zona de playas, como estipula el contrato, y parte se han enviado este año como refuerzo a los barrios «porque se quedaban desasistidos».

Tanto Bellido como el concejal de Limpieza indicaron que el aumento de quejas coincide con la puesta en marcha, en pruebas, de un número de whatsapp para incidencias. Domínguez matizó no obstante que hay más quejas que en invierno pero menos que el pasado verano y añadió que los cuadrantes de limpieza se retocan semanalmente para que sean más flexibles trasvasando operarios de una zona donde son menos necesarios a otras más sucias, algo que han logrado reorganizando servicios de un pliego de condiciones muy rígido. La actual contrata de limpieza se prolonga hasta 2021 y cuesta 35 millones anuales.

Otra medida que se acordó ayer entre el Ayuntamiento y la empresa fue intensificar la recogida de poda en las pedanías. A la vez se ha habilitado un espacio a la entrada de la planta de tratamiento para que los particulares puedan verter allí gratuitamente, y se hará una campaña informativa sobre enseres para evitar que sean abandonados junto a los contenedores.