El alcalde de Alicante, Gabriel Echávarri, concretó ayer que las alegaciones que el Ayuntamiento presentará contra la decisión del Comercio de volver a cerrar las grandes superficies de Maisonnave domingos y festivos se basarán en dos artículos de la Ley de Procedimiento Administrativo, según los cuales la ausencia del trámite de audiencia pública no da pie a la «nulidad de pleno derecho», y en dictámenes del Consell Jurídic -órgano por el que deberá pasar el proceso para anular la Zona de Gran Afluencia Turística (ZGAT)-, que avalan la postura que defiende el Ayuntamiento, según explicó ayer el regidor.

De esta forma, el Consistorio alicantino alegará contra la decisión de la Conselleria de Comercio, dirigida por Rafael Climent (Compromís), de anular la actual ZGAT, aprobada en el año 2013 por el PP y que permite que las grandes superficies de Maisonnave abran los domingos y festivos.

El alcalde de Alicante, Gabriel Echávarri, desde el primer momento en el que se conoció la intención de la Generalitat Valenciana, se mostró contrario a la iniciativa de la Conselleria de Comercio de iniciar una nueva tramitación, anulando la actual ZGAT. Ayer Echávarri volvió a reafirmar su opinión crítica, mandando un nuevo mensaje al titular de Economía, Rafael Climent. Preguntado sobre el futuro comercial, el regidor subrayó ayer el esfuerzo realizado por el Ayuntamiento para aumentar la llegada de cruceros al puerto alicantino. «Espero que no se cierre el comercio en otoño», apuntó el regidor socialista, ante la posibilidad de que el cierre de Maisonnave, tras completarse todos los trámites, se produzca en octubre, uno de los meses más importantes en la llegada de cruceros a Alicante.

De hecho, según la Autoridad Portuaria, está prevista la llegada de al menos doce cruceros en ese periodo. «Hemos luchado mucho para que Alicante sea puerto base, para que haya salidas los domingos, lo que supone que los cruceristas pernoctarían en Alicante el sábado e incluso el viernes», añadió Echávarri, quien insistió en que el cierre de Maisonnave en domingos y festivos perjudicaría los «intereses» de la ciudad. «Espero que se tengan en cuenta los intereses de Alicante», subrayó Echávarri, quien recalcó ayer que la trascendencia de la decisión impulsada por la Conselleria de Economía y Comercio repercutiría negativamente en la economía de la ciudad. Por eso, continuó, se ha «pedido un informe económico» al área autonómica que dirige Climent. «Porque una decisión así debe tener un informe sobre la ciudad», precisó Echávarri.

Sin informes

Sin embargo, desde la conselleria subrayan que la iniciativa de tramitar «desde cero» una ZGAT que cumpla con todos los trámites jurídicos, anulando la existente a día de hoy, se basa en un informe de la Abogacía de la Generalitat, solicitado por la secretaria autonómica, María José Mira (PSOE), y no en ningún informe económico ni sobre empleo. «Esos no existen», añaden desde Valencia.

Por el momento, según reconoció ayer el propio Echávarri, aún no ha mantenido contacto telefónico con el conseller de Economía, quien el pasado viernes intentó sin éxito comunicarle personalmente la decisión de anular la ZGAT de 2013, la que permite a día de hoy que las grandes superficies de la comercial Maisonnave abran los domingos y festivos.

Futuro comercial

Sobre la posibilidad de abrir de nuevo el debate del «abierto total», Echávarri recordó que las dos cuestiones imprescindibles son «la creación de empleo y los derechos de los trabajadores». «La apertura total no está en agenda, ni abrir ni cerrar. Cuando la Generalitat resuelva, empezaremos a tomar otras decisiones», subrayó Echávarri, que sólo contó con el apoyo de Ciudadanos al llevar al pleno de marzo el abierto total.

A mediados de este año, tras pasar de defender el cierre total del comercio (que fue aprobado en el pleno municipal con la única oposición del PP y posteriormente anulado por Comercio) al abierto total (proyecto tumbado en el pleno, con el único apoyo de PSOE y Ciudadanos), Echávarri acordó con El Corte Inglés no realizar más cambios en la libertad comercial a cambio de la creación de 200 puestos de trabajo y garantizar la conciliación de los empleados al no trabajar más de 13 festivos.