La Universidad de Alicante ha iniciado un pionero proyecto para la investigación del proceso de detección de crisis de epilepsia con perros. Existen muchos estudios que muestran que los animales de compañía reducen las arritmias cardiacas y la frecuencia de las crisis, factores relacionados con la muerte súbita en epilepsia. Además, los perros de alerta médica pueden anticiparse a una crisis entre 8 y 15 minutos antes de que se produzca, tiempo suficiente para evitar golpes, caídas y colocar al paciente en un lugar y posición seguros. A pesar de las múltiples investigaciones faltan datos que demuestren qué sustancia presente en los fluidos corporales de un paciente detecta un perro para anticiparse al ataque. En este marco, la Universidad pretende buscar las moléculas marcadoras de las crisis de epilepsia. «En muchos casos, pequeños cambios en el comportamiento o en el estado de ánimo de los pacientes pueden ser detectados por estos animales, pero la posibilidad de que los perros puedan sentir y responder ante cambios fisiológicos no se puede descartar», señala la directora del proyecto, Mª Carmen Carretón.