A fin de reforzar la lucha contra las falsificaciones y la piratería en la web y fuera de ella, Europol y la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO) han aunado fuerzas para poner en marcha la Coalición Coordinada para Delitos contra la propiedad intelectual (IPC3, por sus siglas en inglés). La IPC3 facilitará apoyo operativo y técnico a los cuerpos y fuerzas de seguridad y a otros socios en los Estados miembros de la UE y en otros países, con las medidas siguientes. Facilitar y coordinar las investigaciones transfronterizas.Vigilar e informar de las tendencias de la delincuencia en línea así como de nuevos modus operandi. Potenciar la armonización y la normalización de los instrumentos legislativos y los procedimientos operativos para combatir los delitos contra la PI a escala mundial. Llegar al público y a los cuerpos y fuerzas de seguridad mediante el aumento de la sensibilización y la prestación de formación sobre este ámbito específico de conocimientos especializados.
Las vulneraciones de los derechos de propiedad intelectual (DPI) son un fenómeno generalizado y en constante aumento a escala mundial. El comercio internacional de productos falsificados representa hasta el 2,5 % del comercio mundial, es decir, 338 000 millones de euros, con arreglo a los últimos datos disponibles de 2013. Es una cifra equivalente al PIB de Austria, o a la suma de los PIB de Irlanda y la República Checa. Los efectos de la falsificación son especialmente notables en la Unión Europea, con un volumen de productos falsificados y pirateados que representa el 5 % de las importaciones, es decir, 85 000 millones euros-
Las vulneraciones de los DPI influyen negativamente en los ingresos de las empresas afectadas y producen efectos adversos de carácter tanto social como económico que derivan en la pérdida de miles de puestos de trabajo. Asimismo, pueden causar daños muy graves a la seguridad y la salud de los consumidores, ya que los productos falsificados se fabrican sin tener en cuenta las normas en esta materia que se aplican en el mercado de la UE. Entre los últimos casos notificados a la Europol por países miembros de la UE se encuentran suministros médicos y odontológicos así como airbags.
La lucha contra los delitos relativos a la propiedad intelectual es una prioridad clave para las autoridades encargadas de velar por el cumplimiento de la ley a la hora de proteger a los consumidores de los productos peligrosos y de calidad deficiente, y de enfrentarse a estas redes delictivas con actividades ilegales que entrañan un riesgo bajo y unos beneficios elevados.
Aunque internet se ha convertido en un canal esencial de comunicación y distribución en el comercio electrónico, también ha evolucionado como elemento clave para facilitar el comercio ilegal, ya que permite la venta de productos falsificados y la piratería de obras en una escala mucho mayor2. La distribución de medicamentos y dispositivos médicos falsificados no ha dejado de crecer en los últimos años. Sirva como ejemplo el hecho de que en Internet se venden productos odontológicos falsificados a precios inferiores en 350-750 euros. Hay asimismo un número cada vez mayor de mercados de comercio electrónico que ofrecen todo tipo de recambios de automóvil falsificados, como amortiguadores, puntales, discos, pastillas de freno o airbags, que suponen un importante riesgo para la seguridad de los conductores.
El Director Ejecutivo de la EUIPO, Antonio Campinos, ha señalado. «Es esencial entender mejor la interacción del entorno en línea con las vulneraciones de la PI. Hemos observado que los DPI se usan sistemáticamente de forma indebida como medio para difundir malware, conseguir información de manera ilegal y cometer fraudes en perjuicio de los consumidores, las empresas y los simples usuarios de internet. Todo esto se ilustra en un informe que presenta hoy la EUIPO, en el que se arroja luz sobre la diversidad de modelos empresariales en línea que infringen los Derechos de Propiedad Intelectual (DPI) por medio de numerosos ejemplos ilegales de marketing a través de sitios web de comercio entre empresas y comercio entre consumidores, mercados en línea y redes sociales".
Campinos subraya que "hemos decidido unir esfuerzos con Europol para poder combatir mejor los modelos empresariales que infringen los DPI en el entorno online, con el fin de proteger a los ciudadanos, a las empresas legítimas y a la economía en general». Rob Wainwright, Director de Europol, ha declarado lo que «los delitos contra la propiedad intelectual no son delitos sin víctimas. Las redes delictivas que intervienen en estos actos traspasan las fronteras de la UE y suelen estar relacionadas con otras formas graves de delincuencia, como la trata de personas, el blanqueo de capitales y la ciberdelincuencia. Gracias a la excelente cooperación con la EUIPO, los cuerpos y fuerzas de seguridad y los representantes del sector privado de toda Europa y otras regiones, estas redes pueden ser investigadas y perseguidas. La reciente creación de la iniciativa IPC3 ofrece una oportunidad perfecta para aumentar las sinergias en la lucha contra las vulneraciones de los DPI en la UE y refuerza la cooperación que ya existente».
La EUIPO es una agencia descentralizada de la UE con sede en Alicante (España). Se encarga de gestionar las marcas de la Unión Europea (MUE) y los dibujos y modelos comunitarios registrados (DMC), que proporcionan protección de la propiedad intelectual en los 28 Estados miembros de la UE. También colabora con las oficinas de PI de la UE nacionales y regionales. Hasta el 23 de marzo de 2016, la EUIPO se denominaba Oficina de Armonización del Mercado Interior (OAMI). El Observatorio Europeo de las Vulneraciones de los Derechos de Propiedad Intelectual se creó en 2009 para respaldar la protección y la ejecución de los derechos de propiedad intelectual y ayudar a combatir la creciente amenaza de vulneraciones de PI en Europa. Se encomendó a la EUIPO el 5 de junio en virtud del Reglamento (UE) nº 386/2012 del Parlamento Europeo y del Consejo.
Europol es la Agencia de la Unión Europea para la cooperación y la formación en funciones coercitivas cuya misión consiste en ayudar a sus Estados miembros en la prevención y la lucha contra todas las formas de delincuencia internacional grave y de terrorismo.
