La Conselleria de Sanidad, junto con los Colegios Oficiales de Farmacéuticos de Alicante, Valencia y Castellón, quieren poner en marcha a finales de este año las pruebas piloto para que las recetas electrónicas emitidas por los médicos de la Comunidad puedan recogerse en cualquier farmacia de España. Esto también permitiría que las boticas de las tres provincias dispensaran los medicamentos a usuarios de otras comunidades autónomas.

Por ahora, la administración está todavía desarrollando los sistemas que van a dar soporte a este proyecto de interoperabilidad «eReceta», que el Ministerio de Sanidad está impulsando en todo el territorio nacional. El periodo de pruebas debe superar dos fases: primero, poder ser capaces de generar recetas que sean válidas en farmacias del resto de España y, segundo, poder dispensar los medicamentos prescritos en recetas electrónicas generadas en otras comunidades. Esta segunda fase, según explicaron fuentes de la Conselleria de Sanidad se iniciará en un grupo piloto de oficinas de farmacia para, después, extenderse a toda la red de boticas.

Hacer «interoperables» las recetas electrónicas con las que ya se trabaja en casi toda España supone dar, un paso más, a la tarjeta «única» que la Comunidad Valenciana está empezando a dispensar ahora. El objetivo del Ministerio es articular elementos comunes en la sanidad para compensar los problemas que los usuarios padecen por la dispersión de competencias y modelos.

Más que con la puesta en marcha de la nueva tarjeta, los usuarios sí notarán un gran avance cuando tengan la posibilidad de obtener sus medicamentos en cualquier parte de España evitando trámites burocráticos. El verano es, quizá, una de las épocas en la que la falta de un sistema común provoca más problemas entre los ciudadanos ya que los traslados a otras comunidades por largos periodos de tiempo son más habituales.

Lorena, una joven valenciana con un problema crónico de gastritis, ya ha tenido que lidiar este verano con el problema. «Nos fuimos un mes a Galicia y yo tengo que recoger mi medicación cada 28 días. Justo la siguiente entrega me tocaba a mitad de las vacaciones. Consulté en la farmacia y ni podían adelantarme la entrega ni en Galicia me lo iban a dispensar con la receta de aquí», explica. Como los medicamentos no eran costosos optó por adquirirlos directamente en la comunidad gallega pagando su importe íntegro «y no creo que vaya a reclamar la parte subvencionada para evitarme trámites».

Eso sí, tiene claro que si los medicamentos a retirar hubieran sido los que le recetan para sus episodios de migraña «que son muy caros, sí hubiera tenido un problema. De esos hago acopio antes para que no me falten en los viajes. La verdad es que cuando esto sea viable será genial porque no te tienes que preocupar», asegura. Como ella, muchos enfermos crónicos optan por hacer acopio de medicamentos antes de viajar a otras comunidades conscientes de que sus recetas no son válidas.

En el furgón de cola

La Comunidad Valenciana se unirá a este proyecto de la «eReceta» en el furgón de cola, porque será la última junto con el País Vasco en empezar a desarrollar el proyecto. Encabezando la implantación están las comunidades de Canarias y Extremadura, que hicieron de conejillos de indias para el Ministerio de Sanidad en el verano de 2013 y tienen implantado el sistema completo: pueden emitir recetas compatibles y dispensar también recetas foráneas, desde julio de 2015 en Canarias desde y febrero de este año en Extremadura.

Según el Ministerio de Sanidad, y a fecha de principios de este mes de junio, ya estaban además, en fase de pruebas, Asturias, Galicia, Murcia, Navarra y Castilla-La Mancha. Esta última comunidad es capaz ya, desde el mes pasado, de emitir estas recetas compatibles que, teniendo en cuenta el retraso del resto del territorio, sólo se podrían recoger actualmente en farmacias de Canarias y Extremadura.