A las pérdidas generadas a los restauradores de La Explanada por la tardía notificación de la instalación de la barraca «Racó de Festa» se sumó ayer su tardía retirada tras la Nit de la Cremà. Matías Rodrigo, dueño de Depinchos, ha interpuesto una denuncia ante la Policía Local al no poder instalar los veladores de su local por la dejación de los promotores de la barraca hasta pasadas las 13.00 horas, cuando todo tenía que estar recogido a las 7.00 h., según el acta de Fiestas. «Hemos llegado y nos hemos tenido que poner a retirar las vallas de la calle porque no podíamos montar la terraza», denuncia Rodrigo. Ante esta situación, otros locales de la zona decidieron no abrir. P. ESCRIBANO