Hasta ahora era cada cuatro años. Hoy, dadas las tribulaciones de nuestros padres de la patria, se produce a los cuatro meses de fallida legislatura. El agua vuelve a entrar en campaña. Y lo ha hecho de la manera más surrealista de la que se podía esperar; el PSOE y el PP se han puesto de acuerdo en las Cortes para sacar adelante una propuesta -al resto de los grupos, excepto a Ciudadanos, los problemas hídricos de la provincia como que no les ponen- para exigir al Gobierno que el trasvase Tajo-Segura, clave y estratégico para Alicante, vuelva al escenario que se modificó para elevar hasta los 400 hm3 la reserva de agua a partir de la cual Castilla-La Mancha puede cerrar el grifo. La iniciativa llegó del PSOE, en concreto del diputado David Cerdán, quizá uno de los políticos más sensibles en la provincia hacia los problemas de agua que sufren los agricultores. Cargaba en la sesión contra el polémico memorándum que intentó orden al reparto del agua del Tajo, pero elevando la línea roja. De repente, se encontró con el aliado más inesperado. El propio PP, el partido que redactó el memorándum y cambió las normas del trasvase hace casi ya dos años, giraba en redondo y votaba a favor de instar al Gobierno central a corregir y bajar la reserva de nuevo a los 240 hm3. Una victoria parcial del PSOE, tan acostumbrado a las derrotas políticas en los últimos tiempos, que, por otro lado, deja sin mucho discurso a los elegidos por el PP para representar a la provincia en Madrid tras el 26j , sin palabras a los García-Margallo y compañía, y «malherido» a José Císcar, presidente provincial del PP, y hasta hace cuatro días, en concreto el sábado pasado, máximo defensor del famoso memorándum.

¿Alguien lo puede entender?, o estamos ante una nueva demostración de que los problemas del agua en la provincia sólo interesan a los que los sufren, los agricultores. El Ministerio de Agricultura aprobaba el viernes pasado, tras seis horas de negociación, lo que debía haberse solventado en cinco minutos, el trasvase de 38 hm3 para el mes de junio. Mañana arranca la campaña electoral y el problema del agua vuelve a interesar a los candidatos, tanto a los que están a favor, como a los contrarios. Tras el 26j, regresará de nuevo al cajón. Mientras, tercer año de sequía y ayer abrasados en la provincia agrícola.