«Muchas empresas no invertían en Alicante por miedo a que les pidieran una 'mordida'. Eso ya es pasado», aseguró el alcalde, Gabriel Echávarri, en su cuenta de Twitter. El primer edil aludía así a unas declaraciones suyas realizadas en la Cadena Cope, en las que aseguraba que en el último año en Alicante «han cambiado tendencias y han cambiado radicalmente costumbres; ahora cualquier empresario sabe que puede venir a esta ciudad y nadie le va a pedir 'una mordida' por invertir. Grandísimas empresas multinacionales no venían a Alicante. No venían y están viniendo». Echávarri agregó que «estamos comenzando a traer grandes eventos y congresos internacionales, volvemos a ser tenidos en cuenta en el circuito del que habíamos sido expulsado por cuestiones reputacionales o de imagen».
Por otro lado, en declaraciones a los medios de comunicación acerca de la prórroga de 15 días concedida por el Consell a Alicante Avanza para presentar un proyecto en Rabasa, Echávarri reiteró que el Ayuntamiento no podrá entrar a negociar con Ikea su llegada a Alicante hasta que el Consell no descarte la Actuación Territorial Estratégica.
Para Echávarri, «el partido de Ikea estaba ya en la Generalitat» en alusión a que la administración autonómica es la que tiene las competencias en la tramitación de las Actuaciones Territoriales Estratégicas y que «cuando digan que 'no' (al ATE) empezaremos a actuar».
El alcalde cargó contra el PP asegurando que «si Ikea no está aquí desde hace ocho años es porque aquí gobernaba el PP» y agregó que si la multinacional «se va a otra ciudad, el culpable es el PP».
