La Comunidad Valenciana lo tiene peor para salir de la crisis. Esta es una de las conclusiones del informe «Análisis y perspectivas 2016» de la Fundación de Fomento de Estudios Sociales y de Sociología Aplicada (Foessa), que fue presentado ayer. El traba de Cáritas alerta de una recuperación a dos niveles. Mientras Andalucía, Extremadura, Castilla-La Mancha, la Comunidad Valenciana, Canarias y las Islas Baleares se encontrarían en peor situación ante una eventual salida de la crisis, Cantabria, País Vasco, Navarra, La Rioja y Aragón se encontrarían en mejor situación desde el punto de vista de la pobreza, la desigualdad y el desempleo más grave.

La entidad diocesana advierte, a la luz de los resultados recogidos en el informe, que la probabilidad de que aumente la bolsa de la exclusión social, a pesar del crecimiento económico, es muy elevada. Los indicadores de desempleo analizados, que serían el desencadenante más claro de una buena posición de salida para la población en peor situación, «muestran una recuperación muy débil y, en algunos casos, muy alejados del ritmo necesario para impulsar una reducción intensa de la pobreza y la desigualdad».

Cáritas insta a las fuerzas políticas a destinar 10.000 millones de euros para establecer una renta garantizada con el objetivo de proteger a tres grupos sociales vulnerables: los hogares en pobreza severa, los trabajadores pobres y las familias con hijos a cargo.