El Consell ha denunciado todos los convenios y conciertos vigentes entre la Administración y las universidades -públicas y privadas- para la realización de prácticas de Ciencias de la Salud con el objetivo de firmar unos nuevos y adaptarlos al Real Decreto 420/2015. El anuncio implicará, entre otras medidas, que los alumnos de estos títulos en universidades privadas que inicien sus estudios a partir del curso 2016-2017 no podrán hacer las prácticas en hospitales de la red pública.

Actualmente, la Universidad CEU Cardenal Herrera de Elche imparte los grados de Enfermería y Fisioterapia, dos titulaciones que cuentan con 760 alumnos, 480 en Enfermería y 280 en Fisioterapia. Alumnos que realizan sus prácticas en hospitales y centros de salud públicos y privados de la provincia, bajo la supervisión de profesores asociados, que son profesionales que trabajan en Sanidad y que, a la vez, tutorizan a los alumnos del CEU.

Desde la Conselleria de Sanidad señalaron ayer que «ningún alumno con estudios ya iniciados se vea perjudicado», por lo que se habilitarán fórmulas transitorias de colaboración para que pueda completar la formación en hospitales públicos mediante acuerdos que se firmarán entre las instituciones de educación superior públicas privadas. «Ningún estudiante se quedará sin poder acabar su carrera».

Al margen de la universidad privada, en la Universidad de Alicante estudian actualmente 600 alumnos de Enfermería y 200 de nutrición y en la UMH cerca de 1.000 estudiantes cursan grados de la rama de la salud. Todos ellos hacen prácticas en centros sanitarios públicos a través de convenios que han quedado en suspenso, aunque desde Sanidad señalan que se retomarán de inmediato ajustados a la nueva normativa. Ambos consellers criticaron ayer la falta de coordinación que existía en el pasado entre Sanidad y Educación, algo que ha hecho que hasta el momento estas prácticas «se hayan movido en el terreno de la descoordinación, la falta de rigor administrativo e, incluso, de flagrantes irregularidades en el caso de las universidades privadas». Según Montón «se ha venido permitiendo con sorprendente normalidad que una universidad privada contrate a un funcionario público para impartir docencia durante su jornada de trabajo en un centro público, lo cual no se ajusta a la Ley de Incompatibilidades del personal de la Administración». La consellera de sanidad añade que «la legislación es muy clara. La figura de tutor o tutora de prácticas está muy delimitada y solo tiene cabida entre entidades públicas. Por tanto es manifiestamente anómalo que una universidad privada contrate a un profesional sanitario para impartir docencia a sus alumnos durante su horario de trabajo y en un centro público. No se ajusta a la Ley 53/1984, de Incompatibilidades del Personal al Servicio de las Administraciones Públicas».