Nubes y claros y ni rastro de las tan necesitadas lluvias que no cayeron en abril y tampoco han sido generosas en la primera mitad de mayo, mes en el que tampoco es muy habitual que llueva en una provincia metida ya de lleno en el tercer año de sequía. La semana va a pasar entre nubes y claros y el sol radiante y el calor se prevé ya para la próxima semana.