Panorama desolador para la obra pública en la provincia. La patronal que engloba a las empresas que ejecutan infraestructuras en Alicante (Fopa) denunció ayer en un informe demoledor, que la situación de la licitación en Alicante y la Comunidad Valenciana comienza a ser agónica, al haber descendido drásticamente en el primer trimestre del año, tanto la del Ministerio de Fomento (17,4 millones de euros, un 1,5% del total nacional y un 54% menos que en el mismo periodo de 2014), como la del Consell, que sólo ha invertido 12,1 millones de euros, un 85% menos que entre enero y marzo de 2015. La única Administración que mantiene sus valores de inversión es la Diputación, aunque «es claramente insuficiente para mantener al sector y los puestos de trabajo», subrayaron ayer fuentes de Fopa.

Los empresarios volvieron a recordar la urgencia que tiene ejecutar proyectos como los accesos viarios al aeropuerto Alicante-Elche, la variante de Benissa, el tercer carril de la autovía Crevillent-Benferri y, entre otros, la conexión ferroviaria del Puerto con el Corredor Mediterráneo. «Muchas de estas obras figuran en los presupuestos de 2016 y debieran estar ya en fase de licitación», apuntaron desde la patronal. El derrumbe de la licitación pública es tal, que se ha pasado de un volumen de inversión de 4.600 millones de euros en 2007, a los 237 millones de 2015, o los apenas 30 millones del primer trimestre del presente 2016.

La Federación de Obras Públicas de la Provincia de Alicante (Fopa) reflejó ayer en un informe la alarmante caída de la licitación pública, que durante el pasado 2015 alcanzó el 81% respecto a 2014 en cuanto al Ministerio de Fomento, que licitó sólo 34,7 millones de euros. En cuanto al conjunto de la Comunidad Valenciana, la Administración Central licitó proyectos por valor de 790 millones de euros, cifra que representó el 4,39% el total nacional, cuando en relación a la población y aportación al PIB de España debiera haber sido entre un 10% y un 11%, según los datos que maneja la patronal.

El Consell no sale mejor parado, ya que la Conselleria de Obras Públicas (desde junio de 2015 Vertebración del Territorio) pasó de invertir 38,6 millones en 2014 a 17,5 millones en 2015, un 54% menos. La única administración pública que mantiene el pulso inversor es la Diputación pero no es suficiente, según Fopa.

La legislatura 2012-2015 acabó mal, sobre todo por el déficit que se incrementó todavía más el año pasado con una inversión en el conjunto de la Comunidad de 99,7 millones de euros del Ministerio de Fomento, sólo un 2,8% del total nacional. En carreteras el gasto fue de 40 millones, un 2,52% del conjunto nacional, porcentaje que en el primer trimestre del año ha descendido hasta un paupérrimo 0,68%. Salvo las inversiones en el Corredor Mediterráneo -insuficientes según los empresarios- el Ministerio de Fomento se limita en los dos últimos años a la conservación de la red viaria.

Un año perdido

Al informe de Fopa, se sumó ayer otro de la patronal española de la construcción, Seopan, que advierte de que el sector ha perdido ya prácticamente el año, debido a la coyuntura de incertidumbre política y la necesidad de ajustar el déficit público, con lo que la actividad del sector caerá entre un 15% y un 18%, y encadenará su noveno año consecutivo de descenso. Seopan reveló que la contratación de obra pública por las distintas administraciones registró un mínimo histórico en el primer trimestre del año. A la interinidad del Gobierno, que impide emprender nuevos proyectos de infraestructuras, se suma el ajuste adicional del déficit público. Según las constructoras, la reducción en 2.000 millones de la disponibilidad presupuestaria aprobada el pasado 29 de mayo or el Ejecutivo en funciones tendrá un impacto de 721 millones en los presupuestos de los ministerios inversores, el de Fomento y el de Agricultura y Medio Ambiente. En la provincia afecta directamente a los accesos viarios al aeropuerto y al Corredor Mediterráneo en forma de nuevos retrasos.