La Mesa por la Educación en Libertad ha elevado a la Sindicatura de Greuges su preocupación ante la «falta de libertad de elección de las familias», de lo que culpa a la «política educativa la Generalitat Valenciana».

El portavoz, Vicente Morro, anima a todos los colectivos afectados por el cierre y supresión de aulas concertadas, padres, docentes y centros, a presentar sucesivas quejas ante el Síndic siemrpe que se vulneren los derechos.

Tras presentar una queja por la resolución de la jornada continua, anuncia otra por el cierre y no autorización de aulas de la concertada. «La queja se debe a la falta de conocimiento del criterio que emplea la conselleria para suprimir en la concertada y autorizar en los centros públicos, pese a la bajada de la natalidad» apunta.

El sector de la enseñanza concertada se siente discriminado y valora la Sindicatura de Greuges como «la institución valenciana que vela por los derechos de los ciudadanos».