Los problemas de aparcamiento que existen en muchas ciudades de la provincia, en especial, en Alicante se han convertido de un granero de pasajeros para la red del TRAM hasta el punto de que, según la encuesta de satisfacción del viajeo que realiza Ferrocarriles de la Generalitat, cerca de 3.000 usuaros utilizan el tranvía a diario para evitarse los problemas de aparcamiento, tanto el público (regulado por el Ayuntamiento) como los párking privados. En concreto, un 20,8% de los usuarios, cuatro puntos más, por ejemplo que en 2012, hace cuatro años. Las cuatro líneas del TRAM (San Vicente, Benidorm, El Campello y Playa de San Juan) tienen un tráfico diario de unas 26.000 viajeros (datos del pasado marzo), que utilizan, en su mayoría el tranvía dos veces al día, por lo que el número de usuarios diarios está en unos 13.000. FGV oficialmente sólo contabiliza viajeros.

Por otro lado, cerca de la mitad de los viajeros del TRAM, en concreto el 48%, asegura que «prefiere» desplazarse con el tranvía frente a otras opciones de transporte, tanto públicos como privados, entre otras razones por comodidad (18,1%), economía y ahorro (11,4%) y rapidez (7,8%). Además, el 31,5% de los usuarios, casi uno de cada tres, aseguran que se desplazan con este sistema de transporte a pesar de poseer vehículo propio, frente al 68,5% que no dispone de coche particular, según se desprende de los resultados del último Índice de Satisfacción al Cliente (ISC).

El 29,8% no posee un medio privado alternativo al TRAM; el 20,8% reconoce que no puede aparcar en el lugar de destino; el 11,4% reconoce que viaja en el metropolitano por una cuestión de economía y ahorro; y el 4,4% afirma que no tiene otro medio público para desplazarse. El modo más común de los usuarios para llegar a las distintas paradas de la red es caminando en el 88% de los casos, en lo que emplean 7,4 minutos de media en hacerlo. En moto o coche lo hace un 6,2%, con una media de desplazamiento de 10,8 minutos; en autobús el 4,1%, con una media de 19,4 minutos; en bicicleta el 1,3%, con una media de media de 7,85 minutos; y en Cercanías de Renfe 0,3%, con una media de 26,2 minutos para acceder a la red metropolitana.

Una vez concluido el viaje en el TRAM, el 89,3% ciento de los usuarios prosiguen su desplazamiento a pie y tardan una media de 7,75 minutos en llegar a su destino final. En autobús continúan un 5,1%, con una media de 20,6 minutos; en coche o moto, un 3,9%, con una media de 11,1 minutos; en bicicleta un 1,4% con una media de 7,2 minutos; y en Cercanías de Renfe un 0,1%, que tardan 32,5 minutos de media para alcanzar al lugar a donde se dirigen una vez concluido su trayecto en el tranvía.

Los pasajeros han otorgado una valoración de 8,30 puntos sobre 10 al servicio global de transporte que presta el TRAM de Alicante, de acuerdo con los resultados del ÍSC. De entre los veintidós factores valorados por los viajeros, relacionados con el servicio que presta FGV en Alicante y su área metropolitana, veinte superan los 7 puntos de calificación y trece sobrepasan los 8 puntos. Los aspectos del servicio que han recibido mejor valoración por parte de los clientes son la puntualidad (8,58 puntos), el funcionamiento de escaleras mecánicas y ascensores (8,58), la señalización (8,46), seguridad en el trayecto (8,45) y el compromiso con el medio ambiente (8,43)

La Línea 2 (Luceros-San Vicente del Raspeig) se sitúa en la cabeza de trayectos mejor valorados, con 8,45 puntos, quince décimas por encima de la media global. Le siguen la Línea 1 Luceros-Benidorm), con 8,40 puntos; la Línea 4 (Luceros-Plaza de La Coruña), con 8,30; la Línea 9 (Benidorm-Denia), con 8,22; y, finalmente, la Línea 3 (Luceros-El Campello), con 7,98 puntos.