Los expertos reunidos esta semana en la Universidad de Alicante coincidieron al apuntar que para afrontar la solución a los problemas de abastecimiento que sufre la provincia de Alicante, sobre todo en todo lo relativo al regadío agrícola, hay que recurrir a todas las fuentes, incluida la desalinización, pero advirtieron que el Tajo-Segura es y seguirá siendo estratégico y hay que considerarla una solución «tecnosocial» por la calidad, el precio y lo que ha significado. «El agua del trasvase es incuestionable. Hay familias y regantes que nunca podrán pagar el agua desalada», advierte el catedrático Antonio Rico.F. J. B.