La Concejalía de Medio Ambiente, dirigida por Víctor Domínguez (Guanyar) sigue firme en su intento de mejorar la limpieza en la ciudad. Tras el plan de choque que puso en marcha a finales del pasado año, los técnicos del área trabajan en una modificación de la actual Ordenanza de Limpieza, aprobada por el PP. Entre los cambios que están sobre la mesa destaca un aumento considerable de las sanciones por el incumplimiento de algunos puntos.

En el actual borrador, los dueños de animales que no recojan los excrementos de sus mascotas podrán exponerse a sanciones que ascenderán hasta los 750 euros, casi cuatro veces más de la multa actual que en caso más grave puede alcanzar los 200 euros. «Vamos a endurecer el incumplimiento porque hasta ahora un dueño que no recoge los excrementos de su perro puede pagar apenas 35 euros si no es reincidente y si lo paga pronto», aseguraba ayer el edil Domínguez, quien añade que también se multará con 700 euros (y no los actuales 100 euros) a las personas que saquen la basura fuera del horario previsto. En la misma línea, dejar bolsas de basura fuera del contenedor correcto supondrá una sanción de 300 euros, respecto a los 100 actuales.

Por otro lado, Domínguez se reunió ayer con el edil de Movilidad, el socialista Fernando Marcos, para solicitar una mayor acción policial ante el incumplimiento de la Ordenanza de Limpieza, una queja generalizada entre los vecinos. En el encuentro, ambos ediles acordaron que la Policía Local realice despliegues en puntos concretos para disuadir a los ciudadanos de ensuciar.