Consumir alcohol en la calle está prohibido pero el botellón en el Casco Antiguo de Alicante lleva largo tiempo provocando quejas vecinales, las últimas por los cientos de latas y cascos de botellas que se acumulan en determinados solares desde hace años, en algunos casos hasta un lustro, según denuncian los vecinos. Llama la atención el estado en que se encuentra un descampado de la calle San Rafael, frente al patronato de la hermandad de Santa Cruz, que pese a estar vallado a considerable altura parece un vertedero. «Le llaman el corralito. Antes era un depósito ilegal de motos robadas del que dimos cuenta. Fue desmantelado, sacamos las piezas con la grúa, las llevaron al desguace y cerraron el solar con vallas», explicó un agente de Policía Local que conoce bien este problema del Casco Antiguo.
«Los vecinos se quejan mucho del estado de los solares, de este y de algunos más, porque son un foco de infección y ratas», añadió el agente. Fue hace unos dos años, recordó, cuando se cerró el descampado que servía de depósito ilegal de motos robadas. Por entonces se colocó una valla metálica en precario y después el cerramiento actual, más completo, lo que los que viven allí ven bien, pero no tanto que no se limpie a menudo. «Es un desastre como está», apuntó José María Andrés, un vecino de la parte más alta que se quejó de los malos olores al pasar.
Otros solares deteriorados, según alertó la Policía Local, están entre la calle Balseta y San Juan, al otro extremo del Casco Antiguo. «Es una zona de paso constante de turistas pero la gente tira ropas, colchones y todo tipo de cosas pese a que tienen contenedores. El servicio de recogida de enseres pasa por la noche así que se quedan todo el día ahí los muebles o colchones, y al final acaban en los descampados». También denunció la situación de solares en la calle Virgen de Belén, muy transitada, y donde, según explicó, se acumulan restos de obra, escombros y otros desperdicios.restos de obra, escombros y otros desperdicios.
En otra calle emblemática de la zona vieja de la ciudad, Lepanto, llama la atención otro descampado de importantes dimensiones que está vallado pero en el que se acumulan desde ordenadores a sillas y una gran cantidad de matorrales crecidos, que sirven de hogar para una docena de gatos. Una colonia que no molesta a algunos residentes pero sí a otros, «hay mujeres que vienen y les dan de comer. Se reproducen muy rápido», apuntó una vecina.
La indolencia que algunos colectivos sociales sienten por parte de las autoridades hacia el Casco Antiguo ha motivado que distintas entidades hayan creado una coordinadora. «Hemos acordado unirnos para pasar de las palabras y los planes a los hechos para, en la medida de nuestras posibilidades, aunar esfuerzos y acabar con cuestiones como el abandono de solares o la falta de civismo de quienes toman al asalto nuestras calles», afirmó Rafael Pacheco, sacerdote de Santa Cruz y San Roque. Forman parte de la coordinadora la asociación vecinal, las Cruces de Mayo, las fiestas de San Roque, los comerciantes del Casco Antiguo, el patronato de Santa Cruz o la hoguera Puente Villavieja, entre otros. «Queremos generar sinergias colaborativas entre el tejido social del Barrio a fin de trasladar una imagen de coordinación y unidad que permita al Ayuntamiento afrontar decididamente el empoderamiento de la zona», añadió Pacheco, que reclama más respeto al lugar y su historia. Mientras, los vecinos piden al Ayuntamiento que obligue a los dueños a limpiar los solares o que haga uso de su potestad de sanearlos cargando después la factura a los propietarios.
