El alcalde de Alicante, el socialista Gabriel Echávarri, ha afirmado hoy que el ayuntamiento se sentará a negociar la implantación de Ikea en la ciudad una vez que el promotor renuncie al proyecto de la Actuación Territorial Estratégica (ATE) que prevé su implantación.

En declaraciones a los periodistas tras un acto en el salón Azul con motivo del día del párkinson, Echávarri ha sido preguntado por la posibilidad de que el promotor ('Alicante Avanza') varíe la ATE para excluir el macrocentro comercial adjunto y ha negado que esta opción haya sido planteada formalmente.

El alcalde ha insistido en que al haberse tramitado la implantación en el barrio de Rabasa mediante la figura del ATE, el asunto se escapa de la jurisdicción municipal y la "capacidad de decisión" es única y exclusivamente de la Generalitat.

De esta manera, la única forma en que el ayuntamiento podría volver a ser "actor" sería que la Generalitat desechara el proyecto, que el promotor lo variara de una forma tan determinante que hiciera necesaria que el documento regresara al ayuntamiento para una segunda aprobación por el pleno municipal o que éste último directamente renunciara.

"Nadie ha renunciado a la ATE. Si el promotor renuncia a la ATE, nos sentaremos", ha insistido el alcalde antes de repetir que Alicante Avanza "ni ha modificado ni ha renunciado al macrocentro comercial".

"No nos consta y a la Generalitat tampoco se ha dirigido" para informar de que podría desistir del macrocentro comercial, de manera que, según el alcalde, el proyecto sigue vigente con la petición de 42.000 metros cuadrados para una tienda de Ikea y de entre 82.000 y 83.000 para la zona comercial anexa.