«Llevo cuatro años de embajador en Suecia y ésta es la visita más importante que he tenido desde España. Tenía que estar aquí y he venido», dijo el embajador Francisco Javier Jiménez-Ugarte, quien se desplazó por la mañana desde Estocolmo a Göteborg para acompañar a la delegación de más de 200 alicantinos. Y participó como uno más, poniéndose incluso un delantal para ayudar a preparar la paella de Riquelme para mil personas en la céntrica plaza del Ayuntamiento, como también hicieron el alcalde, el presidente de la Diputación, y los concejales Fernando Marcos y Eva Montesinos.

El embajador valoró muy positivamente la acción promocional alicantina, sólo comparable, dijo, al viaje que hace unos años realizaron a Estocolmo unos 200 castellets del barrio de Gracia de Barcelona, promovido por el Ayuntamiento de la ciudad y la Generalitat catalana.

«Al año siguiente fueron los suecos a Barcelona para ofrecer espectáculos de circo en la calle. Me gustaría que ahora los representantes de Göteborg vayan allí a Alicante correspondiendo a las Hogueras. Creo que todo esto va a tener tanta repercusión como tuvo la acción de Barcelona en Estocolmo, y la unión de Alicante y Göteborg dará sus frutos. Porque a los suecos les gusta corresponder y esto no se lo esperaban. El Patronato de Turismo de esta ciudad no era consciente del esfuerzo que el Ayuntamiento de Alicante y la Diputación estaban haciendo, cuando lo entendieron vieron que es una visita de trabajo fructífera y que se puede sacar también rendimiento para Göteborg».

Lo mismo que lo puede sacar la provincia. El embajador, que tiene una nuera alicantina, destacó la gran cantidad de solicitudes de información que la cónsul honoraria de España en Göteborg, María Pilar Pérez, está recibiendo «de ciudadanos suecos que compran tierras en la Costa Blanca y en la Costa del Sol. Son ciudadanos con un nivel de renta muy alto y la mayoría tiene una segunda residencia. Antes iban mucho a Tailandia y otros países pero han descubierto la Costa Blanca». En este sentido, citó la publicación en sueco que hay en Alicante con una tirada de más de 50.000 ejemplares en papel cuché y gratuita con todo tipo de información, incluso política. De Göteborg también destacó su creciente importancia pese a que sea Estocolmo la que lidere el desarrollo financiero, urbanístico y cultural. «Göteborg es consciente de su importancia histórica porque aquí empezó el desarrollo industrial del país», dijo el embajador, que incidió en los lazos entre ambos países por la Volvo Ocean Race. Él acudió a la entrada en Göteborg de la última regata, a la que también asistió, como recordó, el rey Juan Carlos.

Acompaña a los alicantinos en todos los actos el cónsul sueco en Alicante Björn Sandström, que vino con el grupo en el avión.