Fue en febrero de 2007 cuando Ortiz e Ikea alcanzaron un acuerdo de venta del suelo por 35 millones de euros para que Ikea se instala en Alicante. Al año siguiente la Comisión de Urbanismo aprobó el plan Rabasa que fue denunciado por EU al considerar que había irregularidades en su tramitación. Con todo, Ortiz e Ikea acuerdan que sea en esos terrenos donde se instale la tienda del mueble. En mayo de 2013 el TSJ anuló el Plan Rabasa y al tiempo en noviembre se presentó en Valencia el ATE para Ikea que el actual Consell tiene paralizado.
