El jardín de Canalejas, los parterres de la Explanada, la Plaza de Gabriel Miró y el Panteón de Quijano forman parte este curso del currículum que estudian alumnos de otros cuatro países europeos como exponentes artísticos del Romanticismo.
El Instituto Figueras Pacheco coordina un proyecto europeo Erasmus Plus denominado «European Classroom», con el que ha logrado una puntuación de 10 sobre 10 en la selección llevada a cabo por la Unión Europea.
«Les explicamos la ciudad de una forma cercana, como cuando tienes un invitado, pero siempre desde la perspectiva del Romanticismo porque quedan algunos jardines excelentes desde el punto de vista arquitectónico», como destaca la vicedirectora, Gloria Gómez Monllor.
Son jardines urbanos integrados en la vida cotidiana, frente a los espacios cerrados que anteriormente se vinculaban a los palacios y grandes mansiones.
El recorrido para el profesorado y los estudiantes Erasmus arranca ante en el Panteón de Quijano y su magnífico obelisco de piedra rodeado de estatuas, senderos radiales, filas de olmos y parterres de bojs y mirtos. La profesora explica a los atentos alumnos que el monumento está dedicado al que fuera gobernador civil de la ciudad, Trino Quijano, que murió en la epidemia de cólera que arrasó la ciudad en 1854 después de combatirla de forma heroica.
Emblema
El siguiente punto de encuentro es el espacio más emblemático de la ciudad, la Explanada y su jardín-bulevar longitudinal, que surgió de la primera ampliación del malecón con la urbanización del que se denominó paseo de los Mártires de la Libertad, en honor a Pantaleón Boné y su tropa, fusilados en 1844.
El paseo pegdagógico desemboca en el jardín de Canalejas, el más antiguo de la ciudad, abierto, de tierra y con los espectaculares ficus que actúan de barrera vegetal con el puerto, «como un oasis de frescor y paz», analiza la profesora. Las esculturas de los leones se incorporaron más tarde, regalo del empresario Pritz a la ciudad.
Y como plaza más característica del Romanticismo y mejor ejemplo en toda la provincia, el grupo se desplaza a la de Gabriel Miró, en pleno casco urbano. Todas sus especies evocan ese periodo artístico europeo por excelencia y los ficus, con copas que superan los 25 metros, custodian la fuente de La Aguadora de Bañuls que conmemora la llegada del agua potable en 1898.
Olmos viejos, plataneros, magnolias y una palmera junto al busto del escritor que da nombre al singular espacio, contribuyen a vincular la historia de Alicante con el resto de los países europeos embarcados en el «European Classroom»: Holanda, Rumanía, Francia y Polonia. «El objetivo educativo consiste en mostrar coincidencias para un futuro marco común europeo en el campo de la educación«, concluyen.
