Marzo no «mayea» y eso juega en contra del «puente» de Pascua. La inestabilidad meteorológica que domina los cielos esta semana, y que incluso ha dejado ya lluvias débiles, la proximidad del Día del Padre, las Fallas -gran parte del turista nacional que llega en Semana Santa es autóctono de la Comunidad Valenciana-, y el hecho de que las estaciones de esquí afronten marzo al completo tras un invierno para archivar han ensombrecido las previsiones turísticas en la provincia para los 4 grandes días de Semana Santa, desde el jueves 24 al domingo 27.
Cuatro días en lo que el sector se juega un volumen de negocio en torno a los 20 millones de euros y que esta semana está en duda, porque el 50% de las plazas de Pascua son ocupadas por los turistas españoles. La previsión meteorológica no acompaña para animar las reservas, aunque parece seguro que no habrá lluvia, pero tampoco un sol radiante y máximas de 26 grados como los que se registraron el pasado febrero. El invierno que no hemos tenido puede aparecer en cualquier momento, aunque no en forma de lluvia, nieve ni registros gélidos.
«Si no llueve habrá buena ocupación pero ésta se va a producir a última hora porque, además en una semana como la actual con las Fallas de Valencia en plenitud muchos clientes, incluso de la provincia de Valencia no se han planteado todavía que harán en Pascua, y eso se nota», subrayaba ayer un directivo hotelero de la Costa Blanca, que recordó que «cuando la Semana Santa cae tan pronto no suele ser muy boyante. Con los británicos no hay problema porque enlazan con San Patricio pero necesitamos más visitantes», apuntó este directivo.
Con todo, desde la patronal hotelera Hosbec el mensaje, aunque prudente, era ayer optimista debido que se confía en llenar, al menos el fin de semana, con precios de temporada alta -cien euros por persona y día- la mayor parte de Benidorm. En Alicante, la situación es aún de mayor incertidumbre pues depende al cien por cien de cómo esté el tiempo y, por lo tanto, «no de la última hora, sino del último minuto», apuntaron fuentes hoteleras.
Lo que sí tienen asegurada los hoteles es una buena ocupación para los tres meses anteriores a la temporada alta turística -abril, mayo y junio-, sobre todo por el buen comportamiento del mercado británico cuyas reservas han crecido un 20% respecto al mismo periodo del año anterior.
En cuanto a las novedades para Pascua, cuatro hoteles de Benidorm de la cadena Servigroup han elevado. El Diplomatic de cuatro estrellas pasa a la categoría de cuatro estrellas superior, y los hoteles Venus y Calypso aumentan su categoría a tres estrellas superior.
