El profesorado quería que se regulara cuanto antes la jornada continua en los colegios..., pero no así. Los representantes docentes están molestos con las exigencias de Educación para implantar el cambio de horario en los centros que lo deseen.

La obligación de que todas las tardes, hasta las 17:00 horas, se quede en el centro al menos un miembro del equipo directivo y uno de los maestros -cada docente tendrá que cumplir dos horas de tardes a la semana-, es considerado como un «ataque a los derechos laborales» por parte del sindicato que más ha batallado por cambiar el horario en los colegios, ANPE.

Que las extraescolares tengan que ser gratuitas y coordinadas por el claustro docente y el ayuntamiento también lo consideran abusivo, tanto como que se llegue al 55% de los votos de todo el censo de los padres. Para el STEPV, el sindicato de enseñanza mayoritario, esta medida prácticamente hace inviable lograr los votos necesarios por la escasa participación que arrojan los padres en las votaciones de los consejos escolares.

En general, opinan que lanzar la normativa sin haber sido consultados previamente convierte esta regulación en poco democrática y poco respetuosa con la autonomía de los centros.