Para pagar los primeros 100 euros por los libros de texto a las más de 40.000 familias con alumnos matriculados en centros públicos y concertados, el Ayuntamiento de Alicante va a gastar «inicialmente unos 200.000 euros para el pago del trabajo extra de los empleados municipales, que harán un total de 10.500 horas extra».
Mientras la inmensa mayoría de las localidades de la provincia ya han iniciado el pago de los libros en su primera fase, Alicante sigue tratando de perfilar el modo de hacerlo y, tal y como había adelantado este diario, uno de los últimos escollos se centra en el personal que la Concejalía de Educación considera necesario para que se desplace a los colegios a cotejar la documentación que lleven los padres.
Hasta seis concejalías implicadas en la puesta en marcha de este programa -a la espera de disponer del presupuesto que todavía tiene que aprobarse en pleno el próximo día 23-, ultimaban ayer «el diseño del proceso de selección del personal municipal que deberá recoger y procesar la documentación de las familias beneficiarias de la subvención».
Lejos de haber concluido el proceso para poder publicar la bases que deberán seguir las familias para obtener los primeros 100 euros, desde el Ayuntamiento indican que «próximamente» tendrá lugar «la selección y formación del personal municipal» que se ofrezca para el programa.
Inquietud
A la impaciencia que las familias siguen mostrando ante sus respectivas AMPA, sabedoras de que municipios más poblados, como la propia ciudad de Valencia, ya inició el pasado mes de diciembre todo el proceso, se suma ahora la intranquilidad que les provoca no conocer todavía las bases que regularán este programa.
No obstante, tras la reunión celebrada ayer en el Ayuntamiento entre responsables y técnicos de Educación, Hacienda, Recursos Humanos, Modernización de Áreas, Cultura y Participación Ciudadana, además de la Intervención municipal, se asegura que «se han abordado los detalles de las bases que recogerán el procedimiento de aplicación del programa». Pese a que hace unos días el alcalde negaba que hubiera problema alguno para determinar el personal que se ocupará de gestionar el programa, centrando todo el retraso en la falta de disponibilidad presupuestaria, la reunión celebrada ayer pone sobre la mesa que faltan algunos hilos y que incluso suponen una financiación añadida para un ayuntamiento que debe mirar cada euro que invierte a consecuencia del plan de ajuste del Ministerio de Hacienda.
Las bases incluyen que si se devuelven en buen estado los libros al final del curso, se recibirán otros 100 euros, pero todavía no se ha completado el procedimiento para remitirlo a los colegios.
