El alcalde socialista, Gabriel Echávarri, no podrá sacar adelante su propuesta de abrir todas las grandes superficies de la ciudad durante todos los domingos y festivos del año. El PP, cuyo voto resultaba imprescindible para poder aprobar la medida, ha decidido retirar su apoyo a la iniciativa amparándose en la falta de consenso sobre la misma entre el pequeño comercio.
Los populares plantean volver a la apertura inmediata de Maisonnave todos los festivos, «medida que ya aplicó el PP en el anterior mandato». A partir de ahí y con estudios sobre la mesa, los populares se muestran dispuestos a apoyar que el resto de núcleos comerciales de la ciudad con demanda turística abran los domingos, pero sólo en Semana Santa y verano (en Navidad ya pueden hacerlo). Un planteamiento similar al del Consell y que el anterior equipo de gobierno del PP llegó a pactar con las grandes superficies comerciales de la periferia sin llegar a aplicarlo.
Así se desprende de un escrito del portavoz municipal del PP, Luis Barcala, que se puede leer íntegro en la página cinco de este diario. El cambio de posición de los populares da al traste con la pretensión del alcalde sobre el «abierto total» del comercio y propone regresar de manera inmediata a la situación comercial que existía hasta hace un mes. Es decir, a la libertad horaria que el PP aprobó en 2013 a petición de asociaciones de comerciantes y que permitía a las grandes superficies de Maisonnave abrir todos los domingos y festivos del año.
Tras el cambio de gobierno municipal, el tripartito (PSOE, Guanyar y Compromís) acordó, con el apoyo de Ciudadanos, excluir Maisonnave de la zona con libertad horaria, lo que produjo el cierre en festivos de las grandes superficies de esta arteria comercial desde enero. El alcalde, que justificó la medida en aras de la conciliación familiar de los trabajadores y en el agravio con otras grandes superficies, dio un giro radical en su posición hace una semana. El viernes 19 de febrero anunciaba públicamente su intención de permitir abrir a todo el comercio de la ciudad durante todos los domingos y festivos del año para anticiparse, según esgrimió, a una posible sentencia judicial por los recursos interpuestos por las grandes superficies. Echávarri (6 ediles) se garantizó entonces el apoyo del PP (8) y de Ciudadanos (6) para poder sacar adelante su propuesta, enfrentándose así a sus socios de Guanyar (6) y Compromís (3), que avanzaron que sus 9 votos serían negativos.
Oposición del comercio
De ahí que el apoyo del PP a la iniciativa sea clave. Los populares, que ya en el pleno de octubre de 2015 se mostraron favorables a una libertad horaria para toda la ciudad, apoyaron al alcalde en su propuesta. El PP, no obstante, comenzaron a replegar velas al constatar la falta de consenso y la oposición a la medida del pequeño comercio. Los populares, molestos con la forma de proceder del alcalde, pidieron a Echávarri que aplazara la decisión para abrirla al diálogo.
Ahora van un paso más allá. Barcala insta al alcalde a «no caer en la arbitrariedad o el capricho» y a «conciliar los intereses de todas las partes». Con base en ello, considera que «lo que el alcalde debe hacer es, en primer lugar, volver a la delimitación de Zona de Gran Afluencia del Centro» que existía hasta diciembre, la medida entró en vigor a mediados de enero. Barcala considera que el segundo paso es «tener en cuenta los informes existentes y encargar nuevos estudios técnicos especializados que analicen la situación y las necesidades reales de apertura en toda la ciudad y las consecuencias de ello tanto para las grandes superficies como para el pequeño comercio».
El tercer paso, según los populares, es «dialogar» con los comerciantes. También plantean «un proyecto global para la ciudad» y un plan de futuro. Pasos que, según Barcala, son «ineludibles» para «apoyar cualquier iniciativa» que afecte al sector. El líder del PP en el Ayuntamiento sostiene que, cumplido todo ello, los populares «apoyarán» la vuelta a la zona de libertad horaria original del centro y una «libertad horaria estacional» que incluya Semana Santa y verano „desde antes de Hogueras„ para el resto de núcleos comerciales de la ciudad en zonas que «satisfacen una demanda turística».
«Sólo eso, y nada menos que todo eso, es lo que el PP apoyará y defenderá», sostiene Barcala.
El mandato de Valor
La posición del Partido Popular regresa así a su planteamiento original de 2013 y a lo que, en enero de 2015, los populares pactaron como alternativa con las grandes superficies de la periferia. El exalcalde del PP Miguel Valor reiteró ayer que durante sus meses de mandato, que coincidieron con la primera mitad de 2015, se negoció con los centros comerciales de los barrios su apertura los domingos en Semana Santa, verano y Navidad tras recibir una petición en este sentido de la Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución (Anged). Miguel Valor aplaudió la gestión de la exedil de Comercio Belén González, de la que dijo «trabajó duro para llegar a un acuerdo sobre esto hablando con todas las asociaciones». Valor incidió en que se llegó a un pacto pero que no se quiso aprobar en su mandato para no hipotecar al nuevo equipo de gobierno. El exalcalde añadió que en este asunto «hay que hablar con todo el mundo y es algo complicado y difícil, que se tiene que hacer con tacto».
