Con sonrisas e, incluso, alguna palmada en la espalda. De esa guisa se pudo ver al alcalde socialista, Gabriel Echávarri, y al vicealcalde de Guanyar, Miguel Ángel Pavón, en el primer acto público al que asistían juntos después de que la víspera, en un contundente comunicado, el PSOE instara a Pavón a dimitir por acusar a los socialistas de formar «una gran alianza con la derecha» para sacar adelante la liberalización horaria y asegurar que el edil de Guanyar sigue en el tripartito por «el cargo y el sueldo». Un comunicado que el portavoz de Compromís, Natxo Bellido, dijo «no compartir», aunque lo enmarcó en una «cascada de declaraciones». Para Bellido, «a golpe de noticias y subidas de tono, no se resuelve la crisis». Un conflicto interno que se arrastra por diferentes asuntos y que ha alcanzado su punto álgido con la intención del alcalde de abrir las grandes superficies de la ciudad todos los festivos y la oposición a ello de sus socios de gobierno, tanto de Guanyar como de Compromís.

Bellido, en medio de la guerra cruzada, descartó una alianza con Ciudadanos y reafirmó su apuesta por el pacto. Para ello instó a los dos grupos a «hacer cosas para solucionar esta crisis porque con esa dinámica no lo vamos a resolver. Es cosa de los dos». Una crisis que no ha escampado y cuyos principales protagonistas son Pavón y Echávarri. De ahí que las sonrisas de ayer fueran sólo una ilusión óptica para disimular el enfrentamiento que ambos vienen protagonizando en las últimas semanas y que ayer tampoco dejaron de lado en sus declaraciones.

Echávarri reconoció haber apoyado el comunicado de su ejecutiva en el que se instaba a Pavón a dimitir «si realmente considera» que los socialistas se han aliado con la derecha y le acusaban de falta de confianza. De lo contrario, el PSOE le instaba a un «cambio de actitud» y facultaba al alcalde para adoptar «cuantas decisiones considere». Ayer el alcalde centraba sus críticas en su socio de Guanyar. «No hay un problema con el tripartito, confiamos en él, pero hay una persona, que es Pavón, que tiene problemas de mantenerse y se le ha dicho que se defina». Según, Echávarri «no hay ningún problema con Guanyar ni con el gobierno» y volvió a poner el foco en Pavón: «Si cree en el tripartito hay unos cauces, un respeto y una lealtad. Algo que respetamos 14 de 15».

Pavón, por su parte, se reafirmó en que «en ningún caso voy a dimitir» y al conocer que el propio alcalde respaldó la petición, indició: «Me da igual, no voy a dimitir en ningún caso». El vicealcalde de Guanyar se reafirmó ayer en que «lo que plantea el PSOE no concuerda con el pacto», en materia comercial, y en que la propuesta que lideran los socialistas para ampliar la libertad horaria a la ciudad «es del PP». El líder de Guanyar insistió en que no se plantean una salida del gobierno. «No hay nada que nos haga salir del gobierno en este momento, no se ha retirado ninguna competencia», esgrimió Pavón.

La retirada de competencias es una facultad del alcalde. La ejecutiva del PSOE instaba a Guanyar a actuar con más contundencia con su edil Marisol Moreno por acusar al PP de celebrar juntas de gobierno en un club de alterne o, en caso contrario, daba carta blanca al alcalde para «adoptar las medidas que considere oportunas». «La pelota no está en mi tejado», afirmó Echávarri. Bellido coincide en este punto con el PSOE al considerar que no es suficiente con retirarle la portavocía adjunta. Para Guanyar sí lo es. «El tema está zanjado», afirmó Pavón.