Apenas cumplidas 24 horas desde que la comunidad escolar del Instituto Virgen del Remedio se manifestara, batucada incluida, para reivindicar la necesidad de la mediación social y escolar en el centro escolar y la Zona Norte ante la negativa del Ayuntamiento a financiar el servicio con 12.000 euros, el alcalde, Gabriel Echávarri, se erigió en el salvador y determinó la próxima firma de un convenio por dicha cantidad.

Los tres mediadores, por tanto, están asegurados hasta que termine este curso, como aseveraba ayer la exdirectora del propio instituto y edil de Hacienda, Sofía Morales, al tiempo que aseguró su «interés personal» por lograr una solución, tal y como demandan el día anterior en sus pancartas los propios estudiantes.

Este final feliz para una comunidad educativa que demuestra con datos -véase el estadillo en esta misma pagina- que su proyecto de mediación a cuatro bandas ha reducido la conflictividad no solo en el instituto, donde conviven hasta 35 nacionales, sino en todo el barrio, no está exento de luchas intestinas en el equipo de gobierno, de las que el portavoz municipal, Naxto Bellido, se ha llevado la peor parte.

Mientras la edil de Hacienda comunicaba la buena nueva a las seis asociaciones de vecinos de la Zona Norte, aprovechando que preside la Junta de distrito número 2, Bellido remitía una nota de prensa informando de que el próximo lunes se reunirá con la dirección del instituto «para encontrar soluciones al proyecto».

El alcalde, Echávarri, había ordenado horas antes la firma de un nuevo convenio con el instituto por 12.000 euros, la cantidad que falta para que los tres mediadores prosigan su trabajo este curso, pero no se lo hizo saber al propio implicado, Bellido, dejándole a los pies de los caballos y obligándole a tragarse un sapo no pequeño porque la firma que tiene que plasmarse en el convenio es la del dirigente de Compromís y responsable municipal de proyectos, Coordinación de Área.

La edil de Hacienda, que hasta hace solo unos meses dirigía el Instituto Virgen del Remedio, había liderado desde 2008 el programa de la mediación a cuatro bandas que Bellido declinó prorrogar este año en un principio , lo que provocó la revuelta estudiantil y de las madres -ver INFORMACIÓN de ayer, jueves-.

No se entendía que no tuviera continuidad con Morales, ahora, en el gobierno municipal, y el alcalde, del PSOE como esta concejala, ha aprovechado el entuerto para hacer una demostración de poder confirmando el dinero sin que el firmante lo supiera.

Bellido anunciaba en un comunicado «el reto de ofrecer un servicio de mediación en esa área de la ciudad. Trataremos de tener los recursos suficientes. Se lo comentaré a la concejal de Hacienda, Sofía Morales, también muy sensibilizada con este tema...».

En lo que sí coinciden todos, aún sin que sirva de precedente, es en implicar al Consell para que sea quien financie a más largo plazo.