La concejalía de Transportes del Ayuntamiento de Alicante se está planteando construir una entrada para vehículos entre la avenida de Aguilera y la estación de Adif de cara a las futuras lanzaderas del AVE con Benidorm y Torrevieja, que se encuentran en fase de estudio. El objetivo de esta fórmula es que estos autobuses no colapsen otras arterias pegadas a la terminal alicantina, como Óscar Esplá o Salamanca.

Cabe recordar que la Conselleria encargó un estudio al área de Transportes del Consistorio alicantino para que expusiera si es viable que se pongan en marcha estas líneas, que se encargarían de dar servicio a los usuarios del tren de alta velocidad que tienen como destino final o vienen desde diferentes localidades turísticas de la provincia como Benidorm o Torrevieja.

La demanda la vienen realizando estos dos municipios desde 2014 pero, por diferentes controversias con el gobierno local alicantino, la lanzadera no se ha podido llevar a cabo. Las discrepancias se tuvieron principalmente con la anterior alcaldesa popular, Sonia Castedo, aunque algún antiguo concejal del Partido Socialista en Alicante también mostró sus dudas sobre esta iniciativa de transporte. El actual primer edil, Gabriel Echávarri (PSOE), ya le expuso en julio a su homólogo en Benidorm, Toni Pérez (PP), su voluntad política de desbloquear este asunto.

Según fuentes municipales del Consistorio alicantino, en el caso de que este planteamiento salga adelante implicaría una obra «de la que se tendría que hacer cargo Adif, puesto que los terrenos que hay junto a la avenida de Aguilera son suyos». Por lo tanto, uno de los principales retos del Ayuntamiento alicantino es que la entidad pública dependiente del Ministerio de Fomento acepte ejecutar estos trabajos.