La Junta Mayor de Hermandades quiere que el museo de Semana Santa, largamente reclamado, se instale en el Casco Antiguo, en el marco del plan Racha, en concreto en el antiguo colegio de San Nicolás, junto al claustro de la Concatedral. «Cuesta dos millones de euros y significaría la rehabilitación del antiguo centro escolar, que tiene dos plantas modernas y la de abajo histórica. Forma parte del plan Racha y su recuperación supondría revitalizar el entorno y modernizar la imagen de toda la zona pero habrá que ir paso a paso», dijo ayer el presidente de la entidad que organiza la Semana Santa, Alberto Payá, consciente de la falta de disponibilidad presupuestaria actual del Ayuntamiento de Alicante. «No es el momento pero vamos a seguir insistiendo porque sería un atractivo más para la ciudad».

Su pretensión es insistir con este proyecto, no sólo para museo de Semana Santa, también de arte sacro y que se podría completar con recorridos por la Concatedral de San Nicolás, «aprovechando los hitos de la ciudad, en un proyecto ilusionante, atractivo, arriesgado y ambicioso». Queda descartada para la Junta de Hermandades la idea de un museo en Tabacalera, a lo que se comprometió el exalcalde del gobierno del PP Miguel Valor.

Payá también se refirió a otros retos de la Semana Santa, como es conseguir la declaración de Interés Turístico Nacional una vez logrado el interés comunitario. Y a más corto plazo la declaración de Bien de Interés Cultural Inmaterial ya solicitada a la Generalitat Valenciana y que se podría obtener después del verano. Por todo ello, la familia de la Semana Santa asegura que luchará por esta tradición en Alicante, y confía especialmente en que el alcalde (PSOE) resuelva las trabas que se puedan presentar como el veto de Guanyar a que la Banda Municipal participara en procesiones.