Lorena Aguirre está en Alicante, de la mano de la Fundación Esperanza Pertusa, para explicar la labor que desarrolla la ONG Coopera en el Congo para ayudar a niñas víctimas de violaciones. Con el objetivo de que más personas se unan a esta causa, la fundación ha organizado una cena debate solidaria mañana en el Hotel Huerto del Cura a la que asistirán más de 300 personas entre empresarios, representantes de las instituciones y la sociedad civil.
¿Cuál es la situación de la mujer en el Congo?
Las violaciones como arma de guerra se han sucedido desde hace años, pero ahora se ve un nuevo tipo de violación que antes no se daba en el Congo, la violación a niñas menores de doce años. Es un fenómeno que empezó en un pueblo muy cercano al nuestro. Fue como un shock para la sociedad que ni ellos mismos entendían. Son violaciones extremadamente espantosas porque al ser niñas de 1, 2 o 5 años son muy bestias en las que el destrozo físico es horrible. Eso movió a la comunidad. En todo Congo han ido apareciendo casos. No sabemos realmente cuán grande es este fenómeno. Nosotros ahora mismo tenemos 67 niñas en nuestro programa menores de 12 años.
¿Por qué se da este fenómeno?
Se ha especulado mucho. Al principio se habló de un violador en serie, pero era algo muy raro en esta zona. Luego apareció una niña con los órganos totalmente arrancados y se pensó en tráfico de órganos. Pero parece que se debe más a temas mágicos, creencias populares de los magos de la zona. Hace un par de años mataban a niños con una cuerda y pensaban que esa era una cuerda mágica y que les iba a dar poder o mejorar sus vidas. Así, la última teoría que tenemos por las investigaciones en la zona es que todo esto es por la sangre de la virgen. Lo llaman el diamante rojo, que les hará más fuertes, inmunes a las balas, les quita el sida... En una población que está sumida en la pobreza más ínfima que nunca nadie se puede imaginar, cualquier cosa que les digan que pueden hacer para progresar lo van a hacer.
¿Qué labor desarrolla la ONG Coopera con estas niñas?
Hemos desarrollado un programa que tiene un primer aspecto médico. Mientras la niña está en el hospital curándose de sus heridas apoyamos a la familia para que la madre pueda quedarse 3 o 4 meses con la niña en el hospital y así dar de comer a los hijos que ha dejado en casa. Cuando la niña vuelve a casa hacemos un seguimiento médico de toda la familia, porque son muy pobres y están todo el día enfermos y esto no ayuda en la recuperación de la menor. Por otro lado damos atención psicológica a la niña, un apoyo que ha demostrado unos excelentes resultados. Hay que medir la situación de la menor y ver qué sintomatología traumática tiene: si se hace pis en la cama, si tiene comportamientos regresivos, si tiene pensamientos intrusivos, conductas de evitación. Pongo ejemplos. Hay una niña que fue violada por sus profesor y no se quiere acercar al colegio, otras niñas que han sido agredidas en un río no quieren ni ver el agua. Al mismo tiempo que están en terapia las escolarizamos por un mínimo de 3 años .
¿En qué situación social quedan las niñas que son violadas?
Quedan impuras, estigmatizadas, la sociedad no las quiere. No sabemos qué va a pasar con ellas. Acaban de sufrir una operación muy importante y no sabemos cómo van a crecer, pero probablemente no van a poder tener hijos. No se casarán, nadie quiere casarse con una niña violada, con lo cual si no se casan no tienen futuro. Por eso es muy importante hacer un acompañamiento para muchos años, no nos queremos limitar a los tres años. Nos gustaría llegar a lo máximo, a la universidad, que tengan una carrera y no dependan de un hombre.
¿Por qué las mujeres se convierten siempre en víctimas colaterales de los países pobres o en guerra?
Por estrategia de guerra se ha ido contra la mujer, son el blanco de las torturas porque son muchas. Son el motor de desarrollo, las gestoras de desarrollo, quienes traen el dinero a casa... con lo cual, violar, aplastar y hundir a una mujer es aplastar a toda una familia. Si aplastas a muchas mujeres aplastas a una comunidad y si aplastas a una comunidad aplastas a una sociedad... en el fondo está muy bien pensado.
