El portavoz del PP en el Ayuntamiento de Alicante, Luis Barcala, consideró ayer, acerca de la intención del tripartito de revisar todos los contratos en manos de Enrique Ortiz, que «si hay irregularidades, se castiguen», pero en su opinión «aquí hay un problema más gordo y es que siguen pagándole a las empresas de Ortiz fuera de contrato». Barcala aseguró que en lo que va de mandato se han pagado ya «5,5 millones» a empresas de Ortiz por los servicios de limpieza de colegios y dependencias y el mantenimiento del cementerio. Según el edil popular, licitando o municipalizando los contratos, el tripartito podría haberse ahorrado un 20% de los costes de los contratos, es decir 1,2 millones «y tendría donde recortar sin reducir la paga a los funcionarios».

Barcala acusó al tripartito de «demagogia», pero no explicó por qué en el anterior mandato, el PP no aplicó las medidas que ahora propone, teniendo en cuenta que la contrata del cementerio caducó en junio de 2014 y la de limpieza de colegios y dependencias en junio de este año, coincidiendo con el fin del mandato y sin que el anterior gobierno lo sacara a licitación para entonces.

En cuanto a la situación económica municipal, Barcala lamentó que no se haya dado traslado a la oposición ni del presupuesto, ni del informe sobre el mismo del ministerio ni del informe encargado a la UMH. «No es una manera transparente de facilitar la labor a la oposición», afirmó. Consideró que el retraso en la aprobación del presupuesto es consecuencia de haberlo enviado en enero y sugirió que el tripartito trata de retrasarlo a la espera de un cambio de gobierno nacional. «Alicante no puede estar pendiente de los pactos a nivel nacional. Lo que dice el ministerio es que aprenda a sumar y restar», aseveró Barcala.