El sindicato CSIF ha exigido al Ayuntamiento de Alicante que actué para eliminar los nidos de oruga de la procesionaria que hay en los pinos del complejo de las Cigarreras. La queja se produce a raíz de que una de las integrantes de la Banda Municipal tuviera que se atendida ayer en un centro médico tras caerle encima varios gusanos al salir de su vehículo cuando asistía a un ensayo de la agrupación.

Debido a la reacción alérgica que provocaron los pelos urticantes que desprenden estos insectos, los médicos tuvieron que inyectarle antiinflamatorios y antihistamínicos, así como recetarle un tratamiento que se prolongará durante toda la semana. Las reacción alérgica, según explicó ayer la afectada, que prefiere guardar el anonimato, le afectó fundamentalmente a la mano, el cuello y los brazos. Al parecer, la presencia de estos gusanos está siendo alarmante este invierno. «El personal que trabaja en las Cigarreras me ha dicho que la semana pasada había hileras de estos gusanos por el jardín», explica. Desde el CSIF su secretaria de Prevención, Marián Molero, espera que el Ayuntamiento tome cartas en el asunto «de forma inmediata». Por su parte el concejal del PP, José Ramón González, afirma que «hemos pedido un informe de riesgos laborales para medir la incidencia que esta situación puede tener entre los trabajadores».

Por otro lado, el concejal de Medio Ambiente, Víctor Domínguez, sostiene que el mantenimiento de las zonas verdes de la ciudad por parte de su departamento «es el adecuado». Todo pese a que las grandes pinadas de la ciudad están completamente secas debido a la falta de agua y a la acción de plagas como la de la oruga de la procesionaria. «Actuamos retirando los ejemplares secos y reforestando con nuevas especies. También haciendo riegos puntuales y aplicando los tratamientos para evitar las plagas», señala.