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Juan M. Cortell Tormo

«Una hora diaria de Educación Física baja el riesgo de enfermar»

España dedica 53 horas anuales a esta asignatura en Primaria, muy lejos de las 100 de Francia

«Una hora diaria de Educación Física baja el riesgo de enfermar»

El Parlamento Europeo estipula más horas de Educación Física de las que dan los estudiantes, ¿es realmente insuficiente?

En lo referente a horas lectivas tanto en Primaria como en Secundaria estamos muy por debajo de lo que deberíamos y por tanto a un nivel insuficiente. Informes de la UE indican que España dedica 53 horas anuales a impartir Educación Física en Primaria y 35 horas en Secundaria, muy lejos de otros países como Francia con más de 100 horas al año.

¿Qué sería lo ideal?

La OMS en sus recomendaciones para los jóvenes, de (5 a 17 años, indica que deben invertirse, al menos, 60 minutos diarios de actividad física principalmente de índole cardiovascular. Se ha demostrado que seguir estas indicaciones permite reducir el riesgo de sufrir enfermedades no transmisibles. Lo ideal sería llegar a cinco horas semanales de Educación Física, pero dada la complejidad, tanto la OMS como la UE proponen un mínimo de 3 horas semanales.

¿Tan importante es el ejercicio físico?

Es fundamental para el correcto desarrollo integral de la persona, a todos los niveles. Hablando de salud, la inactividad es tanto o más nociva que el consumo de tabaco. Dedicar menos de 15 a 30 minutos diarios a caminar a paso ligero aumenta el riesgo de sufrir cáncer, enfermedades del corazón, derrames cerebrales y diabetes en un 20% a 30%, y acorta la expectativa de vida de 3 a 5 años, según Lancet. Existen suficientes evidencias respecto al papel del ejercicio físico en el desarrollo positivo de los niños y adolescentes.

¿Qué le parece suplirlo con actividades extraescolares?

Me parece fundamental para poder alcanzar los requerimientos mínimos de actividad física. Quizá cabría matizar que, si además deseamos incidir en otros aspectos de índole psicológico y social, es necesario contar con profesionales sensibilizados y cualificados. El desarrollo positivo del deporte no es un resultado automático, ya que para muchos niños y adolescentes la práctica de ejercicio físico ha supuesto un impacto negativo debido a la excesiva presión de los padres, entrenadores, o a la pobre relación con el grupo de iguales. Hay que encauzarlo correctamente para evitar efectos adversos. La auténtica conexión entre el desarrollo positivo de los adolescentes y la práctica físico-deportiva está determinada por el grado en que el ejercicio físico y el deporte les permiten activar plenamente su potencial y cumplir con su responsabilidad familiar, académica y social.

¿De quién depende que se imparta más Educación Física?

Uno de los principales retos consiste en unir la escuela, sociedad y familias y demás agentes sociales con el fin de diseñar programas deportivos, que, además de perseguir la mejora de las competencias físicas y técnico-tácticas, permitan crear un clima de confianza, seguridad y disfrute basado en las interacciones positivas entre los adultos y los jóvenes participantes.

¿Qué repercusiones tiene la moda entre los jóvenes?

Este es un tema, a mi modo de ver, muy relevante. Vivimos en una sociedad con determinados trastornos (anorexia, vigorexia...) cuya prevención pueden iniciarse desde las escuelas, y el entorno de las clases de Educación Física puede ser de los más apropiados.

¿Y si el estado físico no acompaña para hacer deporte?

Generalmente aquellas personas que más les cuesta o tienen mayores dificultades son las que más necesidad tienen de realizar y mantener sus prácticas físicas. El objetivo es conseguir que la persona disfrute con lo que hace. Esto requiere entender que el tipo de actividad es sólo un medio, y que ha de adaptarse a los gustos, necesidades, posibilidades y preferencias de la persona.

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