El concejal responsable de Limpieza en el Ayuntamiento de Alicante, Víctor Domínguez, defiende la campaña publicitaria para instar a los dueños de las mascotas a recoger las cacas pese a la controversia generada por los explícitos carteles. Domínguez sostiene que han recibido numerosas opiniones favorables de los ciudadanos «un 90%», afirma, aunque admite que «también hay quienes la consideran soez o agresiva». Al respecto, agrega que «ese era el objetivo», porque lo que se pretendía, aclaró, es «llamar la atención».

La campaña, señala, pretende «cambiar las actitudes de una minoría de los ciudadanos» y que están «contentos» con ella. «Si a aluno no le gusta, es un mal menor», agrega el concejal.

Los carteles de la campaña municipal, repartidos por la ciudad, instan a recoger las cacas de perro, a que no se tiren chicles o colillas al suelo y plantean que antes de hacerlo «por qué no te la comes con patatas». Algo que algunos ciudadanos califican de «mal gusto».