Las cuentas de los habitantes de la Comunidad con la Dirección General de Tráfico (DGT) no cuadran. Los números no dejan lugar a dudas: hay más de dos millones de multas impagadas acumuladas hasta noviembre de 2015, último mes del que se tienen datos.

Sanciones por exceso de velocidad, por viajar sin cinturón, por dar positivo en alcoholemia o drogas o por cualquier otra infracción que los conductores del territorio autonómico han decidido no pagar. Al menos no inmediatamente.

En la provincia de Valencia es donde más morosos se concentran. En concreto, 929.992 multas quedaban sin abonar al cierre del balance de ese mes, colocándose como la cuarta de toda España, solo por detrás de Madrid (2.219.655), Sevilla (1.170.395) y Málaga (1.145.331). El índice de multa por vehículo en Valencia se sitúa en 0,56 sanciones por vehículos. Sin embargo, lejos queda de la provincia más sancionadora, Huesca, donde el índice es de 1,7 multas por cada automóvil.

Valencia tiene un parque móvil de 1.632.360 vehículos. Contando una sanción por cada uno, el 57 % de ellos tendría cuentas pendientes con la DGT. Y es que la media temporal que tarda un ciudadano en abonar una sanción aquí es de 194,1 días, es decir, más de seis meses, convirtiéndose en la sexta provincia que más se demora.

En Alicante tardan 171 días

Rascarse el bolsillo para cumplir con el sistema de castigo por las infracciones cazadas por Guardia Civil, Tráfico y policías locales tampoco es plato de buen gusto para los alicantinos, que tardan una media de 171,3 días en pagar, unos cinco meses y medio. Alicante cuenta con 677.580 multas impagadas, de un parque móvil de 1.239.252. Es decir que el 54 % de los conductores tendría alguna sanción sin pagar hasta noviembre de 2015.

En Castellón el número total de multas impagadas es de 392.869. Los castellonenses tardan una media de 149,9 días en reembolsar las penas de tráfico. Los más tardones son los ciudadanos de Melilla, donde pagar las multas les cuesta una media de 401 días, más de un año. Le sigue la ciudad de Ceuta, con 336 días, unos once meses.

Entre las sanciones impagadas se encuentran parte de las impuestas entre enero y noviembre de 2015, un total de 368.871. Esto significa que en la Comunidad las fuerzas que velan por la seguridad del tráfico y que tienen potestad para sancionar pusieron más de 33.533 multas al mes, o lo que es lo mismo, 1.081 conductores multados al día. Durante 2014, la DGT consiguió recaudar más de 10 millones de euros con las multas recabadas por los radares móviles y fijos, así como por las infracciones captadas por el helicóptero Pegasus.